Los pies en la tierra || Bellamy Blake

40. Al agua volveremos

Luna se negó a reclamar la flama y claro que para Clarke, era imposible admitir una derrota. Era obvio que necesitábamos a Luna, pero a este punto ya no sabía si lo seguíamos haciendo por eso o porque Wanheda no podía aceptar que se había quedado sin opciones. Evidentemente, no fue así.
—La pondremos en ella sin su consentimiento.— exclamó la rubia dejándonos atónitos a todos.
—Clarke...— no me dejó hablar.
—Es la única opción, la necesitamos.— me miró seria.
—Eso lo sé.— le di una mirada igual. —Pero incluso Alie los deja elegir.— espeté y Octavia asintió con la cabeza.
—Nosotros se la dimos... y dijo que no.— respondió Bellamy con tono calmado. Sabía que tenía razón, pero el hecho de ir tan lejos no era mi plan favorito, aunque debía admitir que era el único que teníamos. Jamás llegué a comprender enteramente cómo funcionaba esto de la "ciudad de la luz" y Alie pero por lo que había escuchado, lo único que tenía que hacer era tragar una especie de chip para eliminar todo tu dolor pero por lo que habíamos visto, esta cosa reprimía e dolor pero también las memorias. Habíamos logrado sacarlo de Raven, pero había cientos de personas más que necesitaban salir de ese estúpido sueño lúcido.

Jasper había hecho una nueva amiga, realmente me daba gusto ver que poco a poco, estaba mejorando pero al mismo tiempo me sentía mal por él porque la única persona con la que se abría, era Monty pero ahora estaban peleados y nadie sabía muy bien porqué. Aunque era de imaginarse, Monty siempre intentó hacer que Jasper dejara de ahogar su dolor en alcohol pero el pobre nunca tenía éxito y al final, Jasper lo culpaba por todo. Era de esperarse que un día Monty simplemente se cansara de seguir intentado, supongo que no todos pueden salvarse.

Mientras Jasper se despedía de su amiga, Clarke intentaba poner la flama en Luna pero algo salió mal y nos llevarían de vuelta a la costa donde nos encontraron pero de la nada, un par de guardias de Luna nos arrojaron dentro del contenedor y se la llevaron. Me ponía especialmente ansiosa estar ahí porque me daba la terrible sensación de que si alguien se movía demasiado, nos caeríamos al agua.
—Alie nos encontró.— mencionó Octavia.
—La guiamos hasta acá.— murmuré pensando en que este lugar estaba lleno de paz y tranquilidad hasta que llegamos y trajimos a esa arma mortal acá.
—Debemos salir de aquí antes de que llegue a más personas, si consigue que luna tome la llave, podrá tener el control de la flama y estaremos acabados.— nos explico Clarke, al momento que ella y Octavia comenzaban a golpear las puertas del contenedor.
—¡No hagan eso! ¡Alto! ¡Por favor!— exclamaba mientras sus golpes hacían que todo el metal vibrara, haciendo que poco a poco el miedo me invadiera.
—¡Hey!— gritó Bellamy y se acercó a mi, para este punto estaba sentada en el piso con mis manos cubriéndome los oídos y apretando los ojos lo más que podía para tratar de pensar en otra cosa. Las vibraciones se detuvieron y me tomó un instante incorporarme pero cuando abrí los ojos, Bellamy estaba agachado frente a mi y no dejaba de mirarme. —¿Jessie?— habló suavemente. —Ven, arriba.— me ayudo a levantarme. —Estás bien, tranquila.— dijo y me rodeó con sus brazos. —No voy a dejar que ja da te pase.— susurró mientras acariciaba mi espalda. No sabía como sentirme al respecto con todo esto, estaba claro que Bellamy ya no era el mismo del que estuve enamorada y después de tanto tiempo, supongo que lo superé pero eso no quitaba el hecho de que seguía sintiendo que sus brazos eran el lugar más seguro en este planeta.
—Lo siento, no...— me interrumpió.
—Shh, no te disculpes.— acunó mi rostro en sus manos y me hizo mirarlo. No dijo nada más y solo nos quedamos mirando uno al otro por un instante, hasta que un golpe seco en la puerta del contenedor me hizo saltar del susto. Al voltear a ver a las chicas, ellas estaban igual de sorprendidas y poco después las puertas cedieron y dejaron entrar la luz. Alguien más había abierto, así que salimos corriendo y vimos a la amiga de Jasper en el suelo con una flecha clavada en la espalda, le dijo algo a Clarke y ella salió corriendo, así que la seguimos.
—Gracias.— susurré hincándome a su lado a la vez que ella cerraba los ojos finalmente.
—Ven, vamos.— Bellamy tomó mi mano y me llevó por el camino que habían seguido Clarke y Octavia, al poco rato las alcanzamos y seguimos los cuatro juntos. Encontramos una habitación de la que venían gritos, así que entramos dispuestos a pelear pero nos encontramos con dos guardias muertos, Jasper y una niña atados y a Luna con un hombre en brazos, llorando y pidiendo disculpas. Alie había hecho todo esto y Luna había demostrado lo fuerte que era al quitarle la vida a alguien que claramente amaba, era la clase de persona que necesitábamos pero por eso mismo, era la clase de persona que no debíamos buscar. Era afortunada, tenía mucho que perder y ya habíamos hecho que tuviera que arrebatarse a sí misma lo que más quería.

—En serio lo siento, ojalá hubiéramos podido evitar venir.— le dije a Luna mientras nos guiaba hacia la sala común. Ella asintió y me agradeció por lo bajo, finalmente había aceptado tomar la flama y estábamos en camino a la sala común para hacer el ritual de iniciación.
—Del agua nacemos, al agua volvemos.— dijo Luna y todos lo repitieron, levantamos las copas y bebimos. Casi de inmediato empecé a sentir que la fuerza se me iba y entonces supe que nos había dado lo mismo que cuando nos trajo aquí.
—¿Bell..?— intenté hablar pero simplemente me desvanecí.