Capítulo 34.

4K 121 144
                                    

▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎

“La relación con la mente es muy simple: o es tu mejor aliado o el peor de tus contrarios”

▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎☆▪︎

Agotamiento.

08 de agosto del 2020.

10:00 a.m.

Cracovia, Sur de Polonia.

John.

Sin detener el ritmo de mis pasos es que saco el móvil en cuando suena leyendo el mensaje de Michael mientras sigo caminando.

Mike: ¡No se quita! ¡Por una mierda que no se quita!

John: Es un tatuaje. Obviamente no se va a quitar con agua, jabón y esponjas por más semanas que pasen, Michael.

Mike: Si mis madres ven esto, van a triturarme.

John: Te queda genial.

Mike: Tengo ganas de matarte ¡De verdad que tengo ganas de matarte!

Suelto una risa mientras le contesto, el tatuaje de Michael es un símbolo del arte de morir y matar que tienen los líderes de éste. Cuando se lo hizo obviamente no sabía eso pero cuando en la cena de hace unas semanas Jacob le pidió que le mostrará como iba y los demás jugadores voltearon a mirarlo sin reconocerlo despertó sus alarmas queriendo saber, el peleador se lo dijo y ahora se lo quiere borrar cuando lo estaba ignorando ya que no está a la vista.

—¿Ya lo acepta? —Me pregunta Jeremy divertido y niego— No se ve, no se por que llora.

—Porque es un dramático —Contesta Magali a la par que llegamos a nuestro destino y los escoltas nos abren la puerta— ¿Para qué lo pide?

—Estaba borracho —Se ríe él y lo acompaño.

—Solo a él se le ocurre tatuarse ebrio.

—Teufel —Saludan las personas apenas llegamos a la recepción, nos miran— Señores.

Magali y yo asentimos dejando que Jeremy hable.

—¿Está Pol? —Pregunta y le dan una respuesta positiva— Díganle que estoy aquí.

—Puedes esperarlo en la sala de siempre —Dicen y él asiente guiándonos al mismo.

Pasamos por un pasillo que nos lleva hasta una habitación apartada al final del mismo, Tomás entra a revisar asegurándose de que todo esté en orden y cuando nos lo confirma nos adentramos al lugar captando las imágenes, el olor y las luces de este que me ponen a mirar alrededor antes de enfocarme en mi novia que se centra en las fotos.

—Se ve bueno —Comento y ella asiente.

—Lo es —Dice Jeremy— Los míos me lo hizo él.

Un hombre alto de barba larga con los brazos tatuados se adentra al lugar viéndonos a ella y a mí antes de enfocarse en el rubio.

CONEXIONESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora