ᰋ OÙ ALLEZ-VOUS? 天気 Hyunin ࣪. ꒷

¡ ❪ Prólogo ❫ !

Hace mucho tiempo en un lugar lejano, muy lejano...

Hubo un chico con cabello rubio, ojos color azules borrosos, recto ( hetero, hasta donde él creía ), con una personalidad amable y relajada. Vivía solo, a lo que solía aburrirse casi siempre, o al menos muy seguido. A él no le interesaba mucho eso de tener amigos, y a la única persona a la que el consideraba como amigo, persona cercana, era a un tal Jeno... Lee Jeno.

Un día cualquiera, el cielo estaba nublado y Hwang HyunJin debió de haber asistido a clases. Sin embargo, debido a la maravillosa forma de pensar que el chico tenía sobre la escuela, no lo hizo.
"Soy joven, la vida es una y de igual modo, en un futuro todo lo que se ve dentro del colegio no nos servirá de mucho. No moriré por faltar un día".
Bueno, cada quien tiene su punto de vista ante las cosas ¿no?

Todo su horario escolar se la pasó páseandose por ahí; deteniéndose para jugar con mascotas y niños, comprando pequeños antojos para sí mismo, observando los diferentes productos que las tiendas y comerciantes ofrecían.

Haciendo todo eso le dieron las seis de la noche, justamente en esas épocas era invierno, por lo que el sol se estaba yendo temprano, y por algún extraño motivo, terminó explorando como si fuera un niño. De un momento a otro se encontró en medio de un lugar desconocido.

Continuó adentrándose a pesar de parecerle algo escalofriante el ambiente ahí. Era un bosque, no cabía duda, pero no tenía las típicas características que todos los bosques tenían. No se escuchaban los sonidos de los animales, no parecía haber viento, y por lo mismo, no existía ruido alguno de las hojas o ramas golpeándose entre sí.

De repente, en el silencio de ese pacífico bosque un susurro disfrazado del viento pasó cerca de Hyunjin, preguntándole: "¿hacia dónde vas?". Por un pequeño instante sintió como le faltó el aire, sus piernas y cuerpo completo temblaron. Estaba alucinando, sí, eso era, mejor irse. Oh, problema, no sabía cómo irse de ahí.

Siguió caminando mientras tarareaba cualquier canción para evitar pensar en la extraña voz que creyó oír, hasta que a lo lejos alcanzó a ver lo que parecía ser una cabina de telefónica; decidió acercarse para pedir ayudar, esperando que el teléfono sirviera.

— ¿Hola? ¿Hola? Por favor, sirve... –le habló al aparato que resultó no funcionar. Frustrado quiso salir del reducido espacio, soltando un ligero grito al ver una chica fuera de la cabina.– ¿Q-quién eres?

La desconocida tocó dos veces la cristalina puerta, sonriéndole de una extraña forma. No contestando a su pregunta, por el contrario, haciéndole ella una a él.– Hey boy, ¿vas hacia arriba o hacia abajo? –tomó peligrosamente con ambas manos dos lados de la caja, amenazando con moverla. A él rubio no le convenía en nada que lo hiciera, estando tan vieja podría romperse en cualquier momento.– Vamos, no importa lo que digas o lo que hagas, vas hacia abajo.

El cuerpo de Hyunjin calló al suelo tras el movimiento de la caja, demonios, ¿cómo esa chica podía tener esa fuerza? Peor aún, ¿por qué llegó con la única intención de hacerle eso?

— ¡Ah!... Por favor... ¡Detente!

Prácticamente le suplicó a la contraria, quién seguía sonriendo sin prestarle atención.– ¿Estás subiendo... O bajando? Vas hacia arriba, vas hacia abajo. Por favor, ¡ten cuidado con la puerta de cierre!

Pateó la cabina, haciendo que la misma cayera de la, no tan, pequeña roca en la que se encontraba. Esa cosa se llevó a Hyunjin con ella. El chico terminando a nada de estar inconsciente por el golpe en la cabeza que se dió al caer junto con la cabina.

Cómo última cosa pudo escuchar nuevamente la voz de un inicio, preguntándole exactamente la misma cosa.

"¿Hacia dónde vas?"