Los días pasaron de forma rápida, la quimioterapia dolía cada vez mas, sentías tu cuerpo hecho polvo, seguías sin decirle nada a Hanma, empezaste a leer sobre la enfermedad que tenias, tu cabeza se fue llenando de cosas que te hacías mal
¿Moriré hoy?, la misma pregunta te atacaba día y noche, sin embargo shinichiro siempre estuvo para ti, apoyándote y dándote las fuerzas que Hanma no te daba.
Shinichiro descubrió que tenia sentimientos por ti, sabia que estaba mal, tenias a alguien que amabas a tu lado y no lo dejarías ir nunca.
-¿Porque el no te esta acompañando?- hablo shinichiro mientras te daba algo de comida.
-Sigue ocupado en el trabajo- agarraste la comida que el te había ofrecido -¿Cuantos días me faltan?
-No pienses eso, te vas a recuperar- shinichiro palmeo tu cabeza -¿Estas tomando de forma correcta tus medicamentos?
-A veces me olvido de tomarlos -
-No deberías de olvidarte- el chico agarro tu rostro para mirarte, estabas delgada, agarro tus manos, se podía notar tu esqueleto.
-¿Pasa algo?- miraste a shinichiro.
-No me gusta verte de esta manera -el chico puso una de tus manos en su frente -Yo podría tratarte mejor que el
-No digas mas -
-Me siento atraído por ti klee -retiraste la mano que el tenia en tu frente
-Olvídate de esos sentimientos -shinichiro observo tu rostro
-Déjame intentarlo-
-No puedo, terminaras sufriendo- no podías darle esperanzas.
-No olvides tomar tus medicamentos- shinichiro se sentó en su escritorio, terminaste de comer para luego levantarte, shinichiro al ver que no tenias algo para abrigarte se levanto para ubicar su abrigo en tus hombros -No me voy a rendir klee
-Sera mejor que lo hagas, yo ya estoy con alguien
-¿lo amas?- asentiste con la cabeza -¿El te ama?
-Sera mejor que me retire, volveré mañana
-Klee, deja de trabajar, solo empeoraras tu cuerpo
-Lo tendré en cuenta- saliste del lugar, agarraste un taxi para ir hasta tu casa.
Observabas las casas, arboles y el cielo, te preguntaste miles de veces que sentiría morir, ¿podrías ser el ángel de alguien? ¿solo renacerías en otro cuerpo? ¿Cómo seria?
Llegaste hasta tu casa, le pagaste al taxista para luego entrar, Hanma no había llegado aun, observaste tu casa, le faltaba algo, se sentía muy sola.
-Estoy en casa- la puerta se abrió, tu mirada conecto con la de Hanma, el chico observo el abrigo en tus hombros -¿De quien es eso?
-Una amiga- no podías decirle que ibas al doctor seguido
-No me mientas- Hanma se acerco a ti para agarrar la prenda y olearla -¿Con quien te estuviste revolcando?
-¿Porque piensas eso?- arrebataste el abrigo de sus manos
-Porque solo sirves para eso, así que dime con quien te estas revolcando, no es la primera vez que vienes con esta fragancia
-Me he estado haciendo exámenes, estoy - hanma te agarro por los hombros
-¡TE ESTOY DICIENDO QUE NO ME MIENTAS!- Sentiste como te hiciste pequeña, no podías hacer nada, no podías dejarlo por voluntad propia, seguías luchando por mantenerte viva solo por el.
¿Estúpido, no?
-No te estoy mintiendo -Hanma agarro fuertemente tu rostro para besarte.
-Eres mía Klee, si yo te llego a ver con un hombre fuera del trabajo juro que lo matare frente a tus ojos-
-¿Y tu?, ¿Crees que no se que andas revolcándote con las chicas que trabajan con nosotros?- hanma levanto su mano, cerraste los ojos con fuerza para recibir el impacto sin embargo el golpe nunca llego -¿porque no me golpeas?, adelante hazlo, sin embargo no me volverás a ver en toda tu miserable vida
-Mierda cállate- se alejo de ti para ir hacia el cuarto y encerrarse, empezaste a toser, tus manos temblaron levemente, las punzaciones de los sueros que te ponían se hacían presentes.
le mandaste un mensaje a Shinichiro "Dejare el tratamiento".
lo siento si la historia no les esta gustando, la segunda estara mejor
