AMELIA LE FAY no sabía por qué los problemas la perseguían, ella pensó que huir de su 'hogar' y crear su propio destino iba a ser la mejor decisión, y lo fue, pero ella era consciente que no podía huir de su verdadero destino.
El karma era una verd...
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NARRADOR OMNISCIENTE
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( capítulo dos: el caos. )
LOS DIEZ adolescentes se encontraban todos listos en el jardin de la mansión. El lugar estaba bien decorado y perfectamente iluminado. Cada uno se olvidó de lo sucedió en aquella habitación, hicieron como si no hubiese pasado.
Mientras Eros trataba de ocultar su tic nervioso que era tronares los dedos una y otra vez, aquel tic siempre aparecía cuando se sentía inquieto e incomodo.
Hera lo miraba de reojo
—Tranquilo. —susurró tomando su manos. La pelinegra le brindó una sonrisa calida quien Eros respondió con una mueca
—Si mamá se entera nos matará. —murmuró inquieto, en solo pensar que su madre lo viera con decepción lo hacía sentir horrible, el era el mayor, su deber era tener todo en orden. Sentía que la había decepcionado.
Hera soltó un suspiro, odiaba ver a su hermano mayor así. Ver como tomaba la responsabilidad de todos sobre sus hombros, ver como eso lo mataba de apoco, era horrible.
—Hermano mayor, hoy es una fiesta, hay que celebrar y olvidarnos de todo. —trato de hacerlo olvidar. —Toma. —le dió una copa de champagne que se encontraba en la mesa cera de ellos.
Eros levantó las cejas
— ¿Tratas de embriagarme?
— Yo no lo veo así pero si quieres embriagarte..— alzó los hombros con inocencia mientras sonreía —. Solo relájate.
El mayor solto un suspiro y asintió ganándose un abrazo de su hermana menor.
Unos gritos hicieron que su atención fuera hacia la entrada del jardín
— ¡Llego la familia! —alzó los brazos una hombre rubio con rizos, un poco de barba y de ojos verde claro.