T r e i n t a y T r e s

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Los logró a través del esfuerzo son bastante importantes para la persona que se esfuerzo día a día para poder ser el mejor en aquello que lo apasiona. Yo, también sabia que esa sensación de satisfacción al ver que tus esfuerzos finalmente han dado frutos, es algo que te llena el alma de buena energía, te llena al saber de que finalmente lo estas haciendo bien, de que los llantos, las heridas y la frustración no son solamente algo estupido, no, es algo que te llevará a saborear la gloria de tu ímpetu al momento de derrotar aquel rival que creías imposible de derrumbar.

Inarizaki había caído ante Karasuno por una brecha bastante pequeña de puntos, pero lo habían logrado. Y mientras abrazaba al dúo de raros de nuestro equipo, podía compartir ese sentimiento de tranquilidad con ellos. Shoyo sonreía más hermosamente que otras veces y el brillo de orgullo que tenían los ojos de Tobio era algo digno de ver en persona, haciéndome sentir la chica más afortunada del mundo por tener a aquel inocente ser como mi novio.

— ¡Lo hicieron!— chille emocionada mientras le daba un beso a ambos en sus mejillas.

Sus respiraciones eran agitadas y aún mantenían su vista fija en lado contrario, donde veían a sus rivales desplomarse ante aquella derrota justa que habían vivido en carne propia. Bueno, no era fácil jugar con estos cuervos que se alimentaban de sus oponentes a medida que avanzaba el partido, su cansancio era notorio y sus rostros reflejaban esa frustración que hasta el momento, nunca me había tocado vivir en carne propia.

La celebración terminó, ambos contrincantes de dieron las manos y prometieron volver a encontrarse cara a cara el otro año. Miya Atsumu juró que algún día colocaría la pelota para el cuervo pelinaranja y irremediablemente, me tuve que sacar varias fotos con el par para que me dejaran tranquila, sintiendo el aura asesina y llena de celosos del pelinegro sobre mi nuca.

— Se un buen rival para Tobio— dije mientras le sonreía dulcemente al rubio.

Este también me correspondió la sonrisa.

— No se la dejaré fácil querida— mascullo mientras nos dábamos las manos.

Finalmente me dejaron libre y pude ir a la sala de descanso. Mientras caminaba, mi celular vibro en el bolsillo de mi buzo, dándome cuenta que era un mensaje de Kenma.

Kenma🐱 (13:56 p.m.)
Nos vemos mañana en la batalla del basurero 🗑

Solté una risita mientras pensaba en mi respuesta.

Saeko🌸 (13:58 p.m)
Les espera un largooo juego 😂

Kenma 🐱 (13:59 p.m)
Maldita fuerza de gravedad 😡

Saeko🌸 (14:00 p.m)
Aun no entiendo porque juegas voleibol si no te gusta sudar y agitarte demasiado 💀

Kenma🐱 (14:00 p.m)
Kuroo me arrastro a esto 💀

Reí fuertemente mientras bloqueaba el aparato y lo guardaba en mi bolsillo para abrir la puerta de la zona de descanso para los jugadores y entrar. A lo lejos capte a los chicos amontonados en una esquina mientras mantenían los estiramientos necesarios para no estropear sus músculos después de ese cansador juego.

—¡Chicos!— chille mientras llegaba a su lado y me hincaba de rodillas al lado dé Kageyama y Sugawara.

— ¿Traes las bebidas?— preguntó Koushi mientras revisaba mi bolso. Le di un manotazo para que se alejara y sonreí dulcemente para que no se enojara.

In Solitary // Kageyama Tobio [HIATUS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora