Peca 12

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Día 12: Apodos

Podía hacerlo.

Estaba seguro de que podía hacerlo.

Solo era un apodo.

Ya había superado el pánico inicial de llamar a Shinsou por su nombre. Agregar una variable romántica a su manera de dirigirse a su novio no podía ser tan complicado.

Excepto que lo era.

Enterró la cabeza en sus rodillas.

Se sentía como un fracaso. Llevaba ya un par de años saliendo con Shinsou y le había costado una vida atreverse a llamarlo Hitoshi después de trece meses de relación. Aun en ese momento, podía sentir sus mejillas calentarse cada vez que el pelimorado lo llamaba Izuku, y eso que Shinsou parecía adorar demostrarle que no tenía ningún problema para hacerlo, diciendo su nombre hasta para la más mínima cosa.

Izuku esto, Izuku lo otro. Izu. Izu. Izu.

¿Cómo podía decirlo con tanta naturalidad?

Él jamás iba a estar completamente preparado para eso.

Midoriya era tímido, nervioso y sentía su lengua enredarse cada vez que tartamudeaba el nombre de su novio. No podía mirarse a sí mismo dando el primer paso para llamarlo por un mote cariñoso, pese a las ganas que tenía de escuchar a Hitoshi dirigiéndose a él de esa manera. Estaba seguro de que enrojecería hasta niveles insospechados, pero también podía apostar su vida a que se derretiría -en el buen sentido- si eso pasaba.

Jugó con sus dedos, para evitar que su mente comenzara a volar muy lejos.

No era el momento. Tenía que concentrarse.

Shinsou llegaría en cualquier momento y su meta era conseguir superar su vergüenza esa misma noche.

Se palmeó las mejillas.

Bien.

Lo haría.

...

No podía hacerlo.

Lloriqueó mentalmente, mientras sentía la frustración subir como espuma en su interior, a pesar de que por fuera mantenía una pequeña sonrisa para no alertar a su novio. Tuvo que enterrarse las uñas en la palma de una de sus manos para evitar ponerse a maldecir ante su inminente fracaso.

Shinsou iba a su lado, luciendo tan tranquilo como siempre. Miraba al frente con parsimonia, acariciando de vez en cuando el dorso de la mano derecha de Izuku —la que no tenía la palma rasguñada—, que estaba entrelazada con la suya, y la música proveniente de los audífonos que ambos compartían ayudaba a que Izuku no entrara en pánico al ser consciente de que su casa se encontraba cada vez más cerca y, a ese paso, no tardarían más de cinco minutos en llegar.

Estaba contra reloj, porque estaba decidido a no dejar pasar otro día sin hacer al menos el intento.

Sintió una ola de vergüenza recorrer su columna vertebral cuando comenzó a repasar mentalmente todos los apodos que había buscado en internet, para evitar cometer algún error.

Llamarlo por apodos muy largos, cursis o demasiado rebuscados, demostraba falta de sinceridad, por lo que estaban descartados. Lo que era una verdadera lástima, porque se había visto "Game Of Thrones" el mes anterior y se moría por llamar a su novio "Luna de mi vida".

Por otro lado, si halagaba su físico o hacia referencia a él, Shinsou podría creer que era una persona superficial y que solo le importaba su apariencia. Lo que obviamente no era cierto.

31 Pecas [ShinDeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora