Park Jimin hijo de uno de los mayores militares y de alto rango del todo el país especialmente en Busan, Jimin era considerado el hijo perfecto, perfectas calificaciones, perfecta familia, perfecta farsa; si farsa la vida de Jimin era aburrida porque desde que tiene uso de razón jamás ha salido de su casa y aparte si lo hiciera no tendría a donde ir. Una casa alejada de toda la civilización era el hogar perfecto para su padre, pero no para él.
Como todos los días entre semana se dirigía al salón que su padre había ambientado para que tomara clases ahí como lo venía haciendo desde que era niño; tomando diferentes cursos, diferentes materias, diferente todo así se había vuelto la vida de Jimin desde la muerte de su madre. Su madre era policía que trato de ayudar para detener un robo al banco, un robo que cobro la vida de ella y del delincuente que trato de robar el lugar desde ahí su padre no permitiría perder a alguien más y más si ese alguien era su adorable hijo, su mayor orgullo dicho por el frente a las personas.
—¿Entendiste Jimin?
—Si, digo no, perdón.
—Otra vez estas distraído, ¿qué pasa?
—Quiero salir de aquí, de este lugar y disfrutar mi adolescencia como la gente normal.
—Te entiendo Jimin pero son ordenes de tu padre y no se desobedece al general Park.
—Pero si nunca está aquí, se la pasa más en sus tontos campos de entrenamiento que aquí, solo me viene a ver cuándo es mi cumpleaños y el aniversario de la muerte de mi madre, jamás pone un pie en esta casa después.
—Jimin entiéndelo.
—¿Y quién me entiende a mí?, exacto nadie, puede retirarse tutora hoy no estoy de humor para tomar clases.
—Como tú digas Jimin, te veo mañana. —Cerró la puerta tras ella.
—Me duele la cabeza. —Abrió la ventana y se recargo en el marco mientras cerraba los ojos.
—¿Estas bien Minnie? —Abrió los ojos y frente a él estaba Chanyeol extendiéndole una rosa.
—¿Cómo subiste hasta acá?, es un segundo piso. —Tomaba la rosa mientras se sonrojaba.
—El cobertizo estaba abierto y pude sacar la escalera grande. —Ambos se sonrieron.
Park Chanyeol es el hijo del guarda espaldas de Jimin y su novio desde hace siete meses de hecho su primer novio, fue su primer beso y su primera vez después de su clase de bilogía bien dicen que primero la teoría y luego la práctica, confiaba ciegamente en él; su amor era como el de romeo y julieta ya que ninguno de sus padres lo aprobaba ya que una relación empleado-jefe no eran permitidas en esta casa.
—Acabaste muy rápido tus clases.
—Hoy no quise tomarlas.
—Por eso vas muy mal en biología, creo que necesitaras más clases privadas. —Ambos se sonrieron coquetos y Chanyeol entro por la ventana para besar desesperadamente a Jimin.
—Ven sígueme. —Jimin lo tomo de la mano y lo hizo seguirlo.
Jimin realmente estaba enamorado de Chanyeol y eso le alegraba ya que antes de que su padre se metiera de lleno a su trabajo le dijo una vez a Jimin: "Las personas tienen un solo amor para toda la vida y si la vida te lo arrebata ya no puedes enamorarte porque eso sería traicionarlo", Jimin temía perder ese amor y sufrir como su padre.
—Mi amor. —Jimin se encontraba abrazando a su novio después de estar íntimamente con él.
—¿Qué pasa?
—La otra vez le pregunte a mi nana de cómo podría tolerar la pérdida de su esposo y me contesto que es gracias a su hijo.
—¿A qué quieres llegar Minnie?
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❀Blueberry flavor☆ㅣOne-shot
FanfictionHistoria independiente de "Gangsta Boy" y de "¡Oh no!" que nos cuenta como era la vida de Jimin antes de volver a enamorarse.