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Sentía su mirada clavada en mi espalda mientras danzaba en la cocina, me movia de un lado a otro haciendo que pareciera una danza, muchas verduras y distintos tipo de carne estaban enfrente de mi esperando su momento de ser preparados, las zanahorias eran rayadas y otras cuantas picadas en circulos, los brotes de soya estaban siendo marinados en salsa de soya con ají picante y algunos pedazos de carne eran golpeados con fuerza para ablandarce.
—¡Esfuerzate y saldra muy bien!—Dijo mi comprometido mientras veia como estiraba mi brazo para alcanzar una especia arriba del mueble—¡Mejor ayudame Kyojuro!—Solto una riza escandalosa mientras se paraba de la mesa para darme la especia.
El aroma de la mezcla de los jugos de la carne con el ajo invadio mis fozas nazales, empece a picar cebolleta mientras la carne se acababa cocer. Cuando todo estuvo listo, rapidamente empece a emplatar los distintos platos que le preparé a mi acompañante de vida.
—¡Delicioso!—Grito feliz mi sol brillante, me esfuerzo por el y la felicidad que emana cuando prueba comida, que mejor que sea la mía—Hice cosas nuevas que me enseñaron las ancinas en el pueblo que acabo de visitar—Siempre nos contamos las cosas que hacemos, así sean minimas conocemos cada detalle de nosotros—Deberias de ir más seguido a diferentes pueblos—Tomo otro plato con conteniendo diferente y volvio a soltar un escandaloso "¡Delicioso!".
—En esta misión me subire a un tren con un demonio—Dijo tomando un trago de sake-Deberias de pedir apoyo—Ignoro mi comentario y siguio comiendo, olvidé lo que me dijo al instante que me vio con sus hermosos ojos, este ser me llevaba a la perdición solo con mirarme.
—Me tengo que ir, vamos a estar bien—Puso una mano en mi cabeza y la paso por mi nuca, lo abracé por la cintura, me apoye en su pecho, volvi a embrigarme con su aroma—Voy a estar bien, cuando volvamos iremos con mi familia a cocinar—Me abrazó con sus 2 brazos, con todas mis fuerzas lo aprete, como si quisiera que mi ser se combinara con el—Cuando regreses tendrás el mejor festín de todo el mundo, comeremos de la mejor comida y celebraremos nuestro amor —Aseguré con mucha seguridad en mis palabras aunque de mis ojos salían lágrimas amargas.
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