El resto de vacaciones fueron un poco complicadas para nuestra protagonista. Había decidido no hablar del tema y actuar como si nada pasara, eso sí, no tocó a nadie y mucho menos miró a nadie a los ojos. Remus y Peter se habían ido a sus casas preocupados mientras que James y Sirius intentaban animarla. Tras la explicación de Dumbledore, hablar entre ellos y un par de lecturas a la carta, habían comprendido mejor la situación.
El último día antes de tener que volver a Hogwarts alguien llamó a la puerta de la casa de los Potter. James abrió la puerta y recibió con una cálida bienvenida a Remus y a Peter.
-Sirius, avisa a Li- dijo el chico.
Habían decidido reunirse sin decírselo a Layla. No habían hablado del tema y su hermano pensaba que era importante aclarar las cosas.
-¿Por qué me has llamado, James?- preguntó la pelirroja mientras bajaba las escaleras. Tenía su mirada pegada al suelo por lo que no se había dado cuenta de la presencia de sus amigos.
-Si levantaras la cabeza te darías cuenta de que no estoy yo solo- dijo su mellizo.
Ella elevó la mirada ligeramente y vio a sus amigos sentados en la mesa.
-Vamos a hablar- dijo Sirius mientras le obligaba a sentarse.
-No me apetece hablar- dijo Layla.
-Pero debes- sentenció Peter.
Ella no rechistó, pero tampoco quiso dar pie a la conversación. Estuvieron unos incómodos minutos en silencio ya que nadie sabía que decir.
-A ver- dijo James- Nosotros hemos hablado y te queríamos decir que nos da igual la mierda que ponga en esa carta. Sabemos como eres y nada nos va hacer cambiar de opinión-.
-Entendemos que no nos lo hayas dicho antes pero por favor no nos ignores- añadió Sirius.
-No os estoy ignorando- respondió.
-No nos miras a la puñetera cara- dijo Peter- Somos feos, pero no tanto-.
-Os miraría pero no me apetece mataros- dijo Layla de manera cortante.
-No nos vas a hacer nada- dijo su mellizo- Llevas toda la vida sin que pase nada-.
-¡Pero y si pasa ahora!- reprochó- No sabéis lo que es tenerte miedo a ti mismo, tener miedo constante de que en algún momento pierdas el control y todo se vaya a la mierda-.
-Confiamos en ti- dijo Sirius- Sabemos que no nos harás daño, nunca lo harás-.
-Pero, ¿ y si en algún momento pasa?- dijo Layla- Solo con miraros podría acabar con vosotros-.
Remus, el cual estaba escuchando atentamente a la chica, decidió hablar.
-Si en algún momento eso llegase a pasar, no te tendríamos rencor porque sabríamos que no lo has hecho intencionadamente. Siempre nos has querido proteger-.
Entonces, el licántropo estiró el brazo y acarició la mano de Layla.
-De todos modos, si la última cosa que viese fueran tus ojos al morir, créeme que valdría la pena-.
Layla subió la cabeza y miró a Remus con una ligera sonrisa.
-Solo... Tened cuidado- dijo Layla- Todavía estoy aprendiendo a controlarlos-.
-¿Cómo lo haces?- preguntó Peter.
-No lo sé; intento controlar mis emociones porque si no los poderes se descontrolan- explicó la pelirroja- Por ejemplo, si me enfado mucho puede que cree fuego-.
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La cámara de los merodeadores.
FanfictionHistoria sobre la hermana melliza de James Potter, Layla Potter. Ambos van a empezar en Hogwarts y junto con sus amigos tendrán unas locas aventuras. Hay secretos, romance, fiestas, familia y unión. Portada de @gatorro_