Un Príncipe Encantador ¦ #Flufftober

17.- Cumpleaños

Ralsei contuvo la respiración, agachado junto al resto de monstruos que se reunían a sus alrededores, apenas podía ver en la oscuridad de la habitación pero en el profundo silencio logró escucha unos pasos pesados que se acercaban, se forzó a sí mismo a contener la respiración con el alma palpitando con fuerza.

De pronto, una puerta se abrió, bañando la habitación en luz y las luces se encendieron de golpe. Ralsei dio un pequeño salto y extendió ambas manos hacia arriba con una sonrisa.

— ¡Sorpresa! — Gritaron todos a la vez.

— ¿¡Qué demonios...!?

Susie dio un salto con las pupilas dilatadas e incluso sacó su hacha, mirando amenazante a todos los monstruos presentes... hasta que parpadeó confundida, mirando a su alrededor las decoraciones de fiesta en el recibidor del castillo y la comida que estaba sobre las mesas.

Con lentitud, su cuerpo fue relajándose y los miró a todos con los ojos muy abiertos.

— ¿Qué están haciendo? ¿Para quién es todo esto...? — Preguntó confundida y mirando detrás de sí misma.

— ¡Para ti! — Ralsei se acercó corriendo y la abrazó. — Supe que hoy era tu cumpleaños y quise hacer algo para ti, ¡Espero te guste!

— ¡Quítate de...! — Se quejó, quedándose a media frase. — Espera, ¿Cómo supiste eso? Estoy muy segura que jamás se lo he dicho a nadie en toda la escuela.

— Yo se lo dije. — Noelle se acercó con pasos leves y suaves, evitando mirarla mucho tiempo a los ojos. — En ocasiones ayudo a las profesoras con sus tareas y puede que... "casualmente" haya visto tus datos personales en el proceso...

Pudo percatarse que la punta de la cola de Susie se movía nerviosamente a medida que Noelle hablaba, pero la expresión de la más alta parecía aparentar tranquilad ante sus palabras. Ralsei soltó a Susie de su abrazo, aunque ella apenas pareció notarlo, él las observó desde cerca mientras intercambiaban algunas palabras, percibía una que otra tensión en el ambiente pero nada demasiado serio.

Decidió alejarse en caso de que ambas necesitasen hablar a solas y fue con Kris, quien estaba apoyado contra una esquina mientras Berdly le hablaba y hablaba sin parar.

— Sí, bueno, lo sabrías si hubieses estudiando un poco pero verás, los conejos son de los roedores más grandes que existen y son una especie protegida en múltiples países.

"Los conejos ni siquiera son roedores..." pensó Ralsei con algo de confusión, "Y creo haber leído que sólo eran una especie protegida en muy pocas zonas, en la mayoría se le considera una plaga".

El príncipe esperaba ver algún tipo de enojo o incomodidad en Kris pero éste sólo se encontraba sumido en sus propios pensamientos, frío y calmo como siempre, básicamente Berdly estaba hablando con la pared que yacía detrás de él. Se sintió un poco divertido al respecto aunque también mal por Kris, Berdly le había escuchado hablando con Noelle sobre la fiesta y sencillamente no había podido decirle que no cuando se ofreció a ir.

Teniendo una idea dio media vuelta y se acercó a C. Round, un monstruo a una pieza de jugar a las damas color rojiza, redondo con dos pequeñas piernas negras. El monstruo alzó la mirada y mantuvo su sonrisa hacia Ralsei, quien lo empujó con suavidad por toda la habitación hasta llegar a Berdly.