◠ ¹𝐄𝐗𝐓𝐑𝐀 ִֶָ sunoo 'nd jungwon.

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- Sunoo, tengo miedo —murmuró Jungwon. Ambos jóvenes se encontraban en el cuarto del menor, abrazados. No hacía falta asomarse por la ventana para saber que estaba lloviendo, pues las enormes gotas que impactaban contra el piso hacían un sonido que provocaba angustia en Yang. ¡Sin contar los rayos! Oh, los rayos. Incluso sin luz, la caída de un relámpago iluminaba hasta el rincón más oscuro de su humilde hogar.

- Aquí está hyung, Jungie, todo estará bien —plantó un suave beso en los labios del contrario. Un rayo volvió a caer muy cerca, al parecer, pues el sonido del trueno encendió las alarmas de los carros por lo fuerte que sonó. Sin embargo, Sunwoo disfrutó de poder ver las mejillas sonrojadas de su lindo novio por la luz proveniente del relámpago. Empezó a acariciar la espalda de Yang en cuanto este empezó a temblar.

Estuvieron juntos durante un largo rato hasta que una tercera voz se escuchó en aquella casa sin luz. Como si de la lotería se tratase, Jungwon abrió los ojos a más no poder y dio leves saltitos al salir de su habitación para recibir a su mamá.

- No sabes lo preocupado que estaba —murmuró Yang en el cuello de su madre, al borde de las lágrimas. La señora Yang abrazó a su hijo delicadamente y observó a Sunwoo, a pocos metros de ellos, observando la escena con las comisuras de los labios extendidas en una sonrisa limpia.

- Gracias por estar con Jungwon, Sunnie —sonrió la señora Yang con todo el amor que tenía para dar—. No pude haber imaginado un mejor novio para mi hijo —y Sunoo rió, rió porque su novio se avergonzaba de aquellas palabras. Y su suegra también rió, rió por ver felices a los chicos.

Jungwon se acercó al mayor y lo abrazó fuertemente. Sunoo, por su parte, llenó su cara de besos, hasta que la señora Yang gritaba escandalizada por la excesiva muestra de amor que se estaban dando. Era broma, Kim lo sabía, pero Jungwon se avergonzaba fácilmente, por lo que hizo un puchero y se alejó del mayor.

Sunwoo sonrió ante los actos de su novio. Lo consideraba tierno. Oh, Dios, cuanto amaba a ese chico— Bunny —le llamó Kim. Bunny era como le decía de cariño—, te invito unas salchipapas —Jungwon lo miró con sus ojos llenos de brillo y asintió efusivamente. Se detuvo al darse cuenta de algo.

- Osh, Sunoo, pero está lloviendo y no hay luz —puchereó. El mayor rió y negó con la cabeza, un “obvio que no ahorita, babo, en otro momento” se escuchó por toda la casa.

Y quizá empezaron a discutir sobre lo bobo que podría llegar a ser Jungwon.

















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Pero así se amaban.







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a wonnie no le daba miedo la lluvia, rayos y/o truenos, le daba miedo que su mamá no estuviera bien porque todavía no había llegado a casa #rota.

siempre imaginé a estos dos juntos (Sunoo y Jungwon), todo estaba fríamente calculado. Igual subiré un final alternativo para los que vinieron por el jaywon, ya es lo único que falta ???? omg.

✿⠀ ·     𝐑𝐔𝐍     __%      𝐉𝐀𝐘𝐖𝐎𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora