Llegas y haces un desastre, eres tranquilo pero tus pensamientos son un completo tsunami.
Eres la debilidad en cuerpo y alma, eres la inestabilidad en el amor, te busco, te encuentro, pero te evaporas, me pides, me exiges y yo cedo, ¿A qué juegas B...
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–Siempre he tenido la jodida duda por qué siempre, los italianos son tan predilectos para estar en cosas de ese tipo, aunque no le quitemos créditos a las demás nacionalidades, sin juzgar claro, hay otras que son realmente sangrientas en estas cosas, ¿No?
–Sí, Frida, pero... –trago duro, le miro fijo. –La familia Mancini no es muy bien querida.
–Eso en definitiva me asusta, Grace.
–A mi igual, de algún modo estoy relacionada con los Hunther, y si los mayores de la familia mantienen la fiesta en paz, nada ocurrirá.
–Entonces, ¿Si has escuchado de ellos en su totalidad? Grace, yo lo único que quiero es saber a qué demonios se está enfrentando Bahil, ese día solo me dijo esto; cuida de Grecia, su familia, importante, Rizzo Mancini, es su maldición –los vellos se me erizan. –Y un, nuestro secreto.
–Y hasta ahora, Bajhor no sabe de eso, ¿No?
–Exacto, sentí que si le daba información directa a Bajhor, iría como todo un cabeza insensato, pediría reunirse son ese tal Rizzo y hacer esto más grande.
–Tengo un conocido –digo de inmediato. –Obtiene información acerca de dichas familias, le gusta el tema de crimen organizado, narcotráfico e incluso una vez, entrevisto a un grande de esas cosas, todo en anonimato, claro, pero es como si todos se hacen la vista gorda con respecto a ese tipo de familia, no dudaría ni un poquito que policías estén respaldándolos o que se yo.
–Grace, yo intento ayudar ¿Vale? –noto a Frida muy afligida. –Bahil me es importante, es mi cuñado, lo adoro con mi corazón y me lastimaría mucho que algo le ocurra y en su defecto a todos los Hunther, los cuales han sido una familia muy limpia en todos sus aspectos.
–Eso no te lo discuto, quizás tuvieron muchas cosas de las cuales hablar, pero ya sabes, Bajhor siempre buscaba la manera de evitar publicidades amarillista y era más que nada cosas personales en la familia –suspira. –Bahil debe detenerse, ese tal Rizzo no es muy carismático que digamos.
– ¿Le has visto?
–Una vez, me encontraba en una discoteca, buscaba primicias ya tú sabes lo intensa que era –ríe un poco, asiente. –Bueno, una vez habían algunas celebridades en dicha discoteca, estaba tomando fotos en varios ángulos hasta que sentí que alguien me miraba, no le di importancia, ya tenía lo que quería, pero la presión en mi era tanta, que vi a un lado, allí estaba ese tal Rizzo, y aunque no me lo creas, es ardiente.
Y recuerdo esa noche en la discoteca, me encontraba con dos compañeros más, mientras ellos se divertían, yo hacia todo lo contrario, buscaba fotografías para publicar en mi antiguo blog. Di con la mirada de ese tal Rizzo sabía que era él, porque personas a mi alrededor no dejaban de mencionar su nombre, en ese momento algo no me supo bien, su piel canela, cabello oscuro y bajo, tenía barba no tan pronunciada en aquel entonces, musculoso y con un semblante escalofriante, es muy guapo, es hermoso incluso, pero no con una vida que envidiar.
