Duelo de mafias - Chaesoo - Jenlisa g!p

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- Déjame decirte algo. - Habló Lisa. - Si quieres pasar la noche con una de las dos, te recomiendo a la rubia, estuve con ella hace unos días y no sabes lo bien que la pasé

- Entonces por eso me dejaste Rosé. - Se dirigió a Rosé

- ¿Cómo? ¿Ya se conocían? - Preguntó confusa Lisa

- No puedo creer que me hayas cambiado por ella. - Habló indignada. - Peor aún, que te hayas acostado con esta imbécil

- No voy a permitir que me faltes al respeto. - Dijo Lisa enojada

- Cállate o no respondo

- ¿Me estás amenazando? - Preguntó retando a la mayor

Sentía tanta rabia y tanto coraje al saber que ahora Rosé estaba con Lisa y que hasta habían estado juntas. No aguantó más y descargó su enojo dándole un fuerte puñetazo a Lisa.

- No debiste hacer eso Kim. - Dijo Lisa y de inmediato sacó su pistola y le apuntó. - Te vas a arrepentir de haberme golpeado

- No te tengo miedo. - Dijo sacando también su pistola y apuntando a Lisa

- Dispara, a ver si es cierto que muy valiente, eres una cobarde. - Continuaba provocando

- ¡Ya basta! - Gritó el señor Manoban quien venía acompañado por el padre de Jisoo. - ¡Basta! ¡Las dos bajen el arma! - Ordenó

- Jisoo por favor baja esa arma. - Dijo su padre. - ¿Por qué tanto escándalo? ¿Por qué discuten de esa manera? - Preguntó

- Su hija esta loca, comenzó a golpearme, al parecer tenía una relación con ella. - Apuntó a Rosé. - Pero ahora ella está conmigo, por eso me golpeó

Jisoo no quería seguir escuchando, así que salió de ahí furiosa. Rosé comenzó a pensar bien las cosas, tal vez era mala idea seguir con todo esto de la venganza. Ella sólo quería ser feliz, al lado de Jisoo, a quien ahora mismo había lastimado, y le dolía demasiado haberlo hecho. Así que fue rápidamente tras ella.

- Rosé espera. - Hyeri la detuvo. - Ahora mismo está muy enojada, deja que se le pase el coraje, mañana hablas con ella ¿si?

- Voy a dejar todo esto Hyeri, lo único que quiero es ser feliz, no quiero lastimarla, no puedo verla así

- Iré a hablar con ella, espero que eso te deje más tranquila ¿si?

Hyeri fue detrás de Jisoo, corría rápidamente pero Jisoo estaba hecha una furia e iba muy rápido. La alcanzó cuando ya había llegado a su habitación.

- Jisoo espera. - Dijo Hyeri

- No vengas a defender a tu amiga porque no voy a escucharte, ahora por favor déjame en paz. - Dijo abriendo la puerta de su habitación

- No vengo a defenderla, te juro que yo no sabía nada, es más, estoy tan sorprendida como tú, yo pensé que ella te amaba a ti. - Comentó. - Nunca creí que fuera capaz de hacerte algo así

- Me duele que me haya traicionado, yo la amo Hyeri, y resulta que se acostó con la estúpida de Lisa

- Si quieres desquitar el coraje que tienes. - Habló sensual. - O quieres pagarle de la misma manera. - Se acercó a ella. - Aquí estoy yo. - Susurró en su oído. - Por favor Jisoo a ella no le importaste cuando fue y se acostó con Lisa, que a ti tampoco te importe

Jisoo la tomó de la cintura pegandola a su cuerpo y comenzó a besarla desesperadamente. Entraron a la habitación hasta llegar a la cama. Fue una larga noche llena de placer.

Por la mañana Jisoo despertó. Observó a su lado, ahí estaba Hyeri quien aún dormía plácidamente. Se quedó por un par de minutos mirando el techo y los sentimientos de culpa se hicieron presentes. No debió acostarse con Hyeri, ni dejarse llevar por el coraje que sentía. Pero ya era demasiado tarde.

- Buenos días. - Dijo Hyeri abrazándola y besando sus labios. - Anoche nos la pasamos muy bien, espero que lo hayas disfrutado tanto como yo

- Sí, lo disfrute

- Te espero en el baño. - Dijo sonriendo

Hyeri se levantó y para provocarla ni siquiera se molestó en colocar una sábana en su cuerpo desnudo.

- Te estaré esperando, no tardes mucho. - Le guiñó

Jisoo se quedó ahí sobre la cama un par de minutos más, hasta que escuchó que tocaban la puerta, así que se levantó y comenzó a buscar su ropa. Colocó sus boxers y una camiseta, para después ir y abrir la puerta. Pensó que sería su padre, pero era Rosé quien estaba ahí.

- ¿Qué haces aquí? - Le preguntó

- Quiero aclarar lo que pasó ayer

- No te preocupes, no tienes porque hacerlo

- Tengo que decirte porque estoy haciendo todo esto, es que yo...- Fue interrumpida

- ¿Si vas a venir? - Preguntó alguien

- ¿Con quién estás? - Preguntó Rosé. - Déjame entrar. - Estaba forcejeando con Jisoo hasta que por fin logró ver a aquella mujer. - No puedo creerlo. - Dijo al ver a su mejor amiga envuelta en una sábana

- Perdón amiga, no pude evitarlo. - Habló Hyeri

- Eres una estúpida Kim. - Dijo dándole una fuerte bofetada

- A ti no te importe cuando fuiste y te acostaste con Lisa, déjame en paz. - Dijo enojada

- ¡Yo no me acosté con Lisa!

- Ella me lo dijo, me afirmó que se la pasó muy bien contigo

- Son mentiras, nunca estuve con ella, en cambio tu, mírate, te acabas de revolcar con la que decía ser mi mejor amiga. - Dijo Rosé comenzando a llorar. - No quiero saber nada de ti, de ustedes dos

- Amiga perdóname. - Dijo Hyeri acercándose a Rosé

- ¡Cállate! ¡No me toques! - Gritó. - No quiero verte

Semanas después

Jennie se encontraba en aquel bar al cual Lisa siempre solía asistir. Necesitaba hablar con ella, era algo de suma importancia.

- Lisa. - Le habló

- Gatita. - Sonrió. - Hace tiempo que no te veía por aquí ¿Qué se te ofrece?

- Necesitamos hablar, es algo importante que tienes que saber

- Ahora mismo estoy ocupada, una chica me espera

- En serio es algo muy importante Lisa, necesito hablar contigo

- ¿Así de importante? - Preguntó

- Sí Lisa

- Entonces habla

- No creo que este sea el lugar adecuado para hablar

- Nunca hago esto pero, solo tratándose de ti. - De su bolsillo tomó su celular. - Dame tu número para mandarte la ubicación de mi casa, nos vemos ahí mañana

Jennie accedió y le pasó su número de teléfono para que Lisa mandara la ubicación.

- Nos vemos mañana gatita. - Dijo eso último y se marchó de ahí con aquella mujer

Le dolió tanto ver como se iba con aquella mujer. No tenía ni la más mínima idea de cómo Lisa tomaría la noticia, tenía tanto miedo.