Duelo de mafias - Chaesoo - Jenlisa g!p

17

Por la mañana Jennie salió de su casa para ir a hablar con Lisa. Después de varios minutos conduciendo, por fin había llegado. Habló con los hombres de seguridad y la hicieron pasar.

- Hola Jennie. - Saludó Lisa saliendo de su casa. - Te estaba esperando

- Gracias Lisa. - Bajó de su auto

- Pasa por favor. - Entraron a la casa. - Ayer me dejaste pensando en eso importante que tenias que decírme, ni siquiera pude disfrutar bien de la fiesta, es que mi padre vino y organicé una pequeña reunión para recibirlo. - Sonrió. - Pero ya dime por favor ¿qué te pasa?

- Es que no se como lo vayas a tomar. - No aguantó más y comenzó a llorar

- Solo dilo Jennie, si necesitas ayuda en algo yo puedo hacerlo, cuenta conmigo, soy tu amiga ¿no?

- Estoy embarazada. - Confesó. - Estoy esperando un hijo tuyo

Lisa soltó una carcajada.

- Es imposible que sea mio Jennie, tu y yo nunca hemos estado juntas. - Dijo de inmediato. - Ve y dile a su padre que se haga cargo

- Sí es tuyo Lisa

- Es imposible ¿por qué dices eso?

- Sí estuvimos juntas Lisa, hace un par de semanas hicimos el amor

- No, estas mintiendo

- Tu estabas muy borracha por eso no recuerdas nada, pero era yo

- No, esa vez me acosté con otra chica, no eras tu, me hubiera dado cuenta Jennie. - Continuaba negando

- ¡Era yo Lisa! - Gritó. - Yo era esa chica con la que hiciste el amor, porque eso fue para mi, fue algo tan lindo

- No, no puede ser. - Pasaba sus manos por su rostro en señal de frustración. - ¡Maldita sea! - Gritó. - Soy una estúpida

- Solo nos dejamos llevar por el deseo y la pasión, simplemente se nos olvidó cuidarnos

- ¡Tu estabas bien Jennie! - Le gritó. - Pudiste haber hecho algo, pero estoy comenzando a pensar que lo hiciste a propósito para tenerme por fin contigo, porque sabes que yo no te amo, que no quiero estar contigo. - Aquellas palabras dolían demasiado a la castaña. - No estoy lista para esto Jennie, perdóname pero yo no me haré cargo de nada. - La tomó del brazo. - Vete por favor, vete y no vuelvas a buscarme, no quiero saber nada de ti ni del hijo que estás esperando, por favor vete. - La echó de su casa

Lisa entró nuevamente e intentó calmarse un poco.

- Escuché todo lo que hablaste con esa chica. - Dijo su padre. - No puedo creer que la hayas tratado así, yo no te crié de esa manera Lisa

- Papá con todo respeto, estos son mis asuntos, así que te pido de favor no te metas

- ¡No me hables así Lalisa! - Le gritó. - Tengo derecho de intervenir porque es mi nieto el que está en juego en todo esto

- ¡¿Cuál nieto papá?! ¡Olvídate de eso!

- ¡Vas a responderle a esa mujer y si no quieres hacerlo tendré que obligarte! - Advirtió

***

Jennie salió de aquella casa, subió a su auto y condujo hacia su hogar. Con el corazón roto, claro. Le dolían demasiado todas las palabras que le había dicho Lisa. No quería saber nada de ella ni del hijo que esta esperando.

Llegó a su casa y para su mala o buena suerte, su hermana estaba ahí y por más que intento esconderse, Jisoo observó que no estaba nada bien.

- ¿Qué te pasa Jenn? - Le preguntó

- Nada Jisoo. - Respondió

- ¿Cómo que nada? Pero si estas llorando. - La miro fijamente. - ¿Qué tienes?

Jennie subió corriendo las escaleras para ir y encerrarse en su habitación. Jisoo de inmediato fue tras ella y antes de que cerrara la puerta la alcanzó.

- ¿Qué te pasa Jennie? - Volvió a preguntar entrando a la habitación. - ¿Por qué lloras? No me gusta verte llorar

- Me da vergüenza decirte. - Soltó el llanto nuevamente

- Me estas asustando Jennie. - Fue hacia ella y la abrazó. - Siempre voy a estar contigo, dime por favor lo que te sucede para poder ayudarte

- Estoy embarazada. - Confesó llorando

- ¿Es de Jongin? - Preguntó. - Lloras porque seguramente no quiere hacerse cargo ¿verdad? - Dijo enojada. - Ese idiota me va a escuchar

- Jisoo espera. - La detuvo. - No es de Jongin

- Entonces dime de quien es, te juro que lo mato

- De Lisa, se llama Lalisa Manoban, es hija de un mafioso tailendes, creo que ustedes habían tenido problemas con ellos, perdón Jisoo. - Continuaba llorando. - Fui a hablar con ella, pero me rechazó, me dijo que no quería saber nada de mi ni de nuestro hijo

Eso fue suficiente para lograr encender a la mayor. Salió a toda prisa de su casa, subió a su camioneta para ir con Lisa. Esa idiota la iba a escuchar.

Al llegar, sus hombres la dejaron pasar, pues ya sabían quien era. De inmediato bajó de su camioneta hecha una furia. Ni siquiera se molestó en tocar la puerta, simplemente entró.

- ¡Lisa! ¡¿Dónde estas maldita cobarde?! - Gritó enojada

- ¿Qué mierda te pasa? - Preguntó Lisa

- Eres una desgraciada. - Fue hacia ella y le dio un fuerte puñetazo

- ¿Puedo saber por qué el maldito golpe?

- Primero me quitas a la mujer que amo y ahora resulta que mi hermana esta esperando un hijo tuyo y no quieres hacerte cargo

- ¿Qué dices? ¿Jennie es tu hermana? - Preguntó confusa

- ¡Sí es mi hermana! - Respondió. - Y vas a hacerte cargo ¿entiendes? O tendré que obligarte a hacerlo

- Sí me haré responsable Jisoo, dile que mañana iré a hablar con ella. - Avisó. - Una cosa si te digo, yo no quiero casarme ni mucho menos, solo me haré cargo de mi hijo, tu hermana debe entender que no la amo

- No puedo creer que Jennie se haya enamorado de alguien como tú. - Habló con repudio. - La vas a lastimar, pero es lo mejor, no es porque sea mi hermana, pero ella es una gran mujer, estoy segura de que si le dieras una oportunidad terminarías profundamente enamorada de ella, pero no la mereces.  - Dijo eso último marchándose de ahí

***

Lisa había llegado a la casa de Jennie, pues como lo había dicho ayer, tenia que hablar con ella y aclarar todo.

- Buenos días señorita. - Saludó una empleada

- Hola buen día. - Saludó también. - Busco a Jennie Kim

- Sí gusta sentarse, iré a hablarle, con permiso

Lisa esperó en la sala. A los pocos minutos Jennie apareció.

- Hola Jennie

- ¿Qué quieres Lisa? - Preguntó

- Primero que nada, quiero pedirte perdón por la forma en que me comporte ayer, no debí decirte todo eso. - Se disculpó. - Tenía miedo, esa noticia me cayó de sorpresa, no me la esperaba y me asusté, tengo miedo Jennie porque nunca estuvo en mis planes ser madre

- Te entiendo. - Suspiró. - ¿Qué más quieres?

- Solo decirte que me voy a hacer cargo de ti y de mi hijo, te llevaré a todas tus citas con el doctor para revisar como va el embarazo, te juro que estaré contigo en cada momento apoyándote cuando lo necesites. - Se acercó a ella y tomó su mano. - Pero solo eso Jennie, créeme que me gustaría corresponder a tus sentimientos, pero no puedo

- Con que le respondas a nuestro hijo me conformo, gracias por no dejarme sola