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𖣘 INDEFENSA 𖣘
❒ Kōyō ❒
06 Agosto, 2007 ━━━━━━━━━━━━━━
Hace un tiempo que había empezado a salir más seguido con Kazutora, tal punto que ya simplemente nos escribíamos la hora para vernos, aunque claro, no era todos los días ya que cada uno tiene cosas que hacer o simplemente situaciones en las cuales uno no puede disponer de tiempo; no era de barrera, pues ambos tenemos empatía y comprensión mutuamente. Asimismo la confianza se iba recuperando poco a poco, además que podía percibir que él estaba tomando mucho más confianza para ser honesto conmigo, esto en el sentido de comenzar a contarme un poco lo que le llega a abrumar o problemas que tiene; no han pasado de unos "simples" ━━por decirlo así━━ problemas, como un "¿qué puedo ponerme hoy?, ¿sabes cómo cocinar esto?, ¿cómo se hacía tal cosa?" y más. Realmente no me importaba la magnitud que tuviera el problema, siempre le ayudaría.
Hoy no saldríamos, no porque no quisiéramos, simplemente yo no podía hacerlo.
Suspiré cuando ví que ni el Sol se veía, me había despertado demasiado temprano por lo que veo pero es que. . . simplemente no puedo dormir bien estos días. Toqué aquel vidrio algo empañado y me separé en seguida para después volver a mi cama, una ves ahí miré el techo. No es que sufriera de insomnio. . . o no siempre era así, pero estos días así son.
━━Es difícil hacerlo ¿sabes?, aún me siento culpable y no creo que ésto se vaya. . . te extraño.
Dije mientras miraba hacia arriba, alcé mi brazo izquierdo, teniendo mi puño hacia arriba; intenté no ponerme melancólica, pero me fue imposible, lo único que agradezco es que ya no lloré como hace un tiempo. Me senté por la orilla de mi cama y comencé a buscar entre el pequeño cajón que tenía, saqué una que otra cosa y al final lo encontré. . .
━━Tengo muchas dudas, no sé si está bien lo que estoy haciendo, creo que sí. . . Tú me dijiste que estarías conmigo cuando pasara esto ¿no?. Pero aquí las preguntas son: ¿dónde estás? ¿sigues mirándome?.
Tomé mi celular y revisé mi celular, este decía que eran las cuatro y cuarto de la mañana. ¿Tan temprano es?. Al parecer sí. Fregué mis ojos con mis manos y salí de mi habitación no sin antes tomar una sudadera para que me tapara del frío que se sentía en la casa; al llegar a un pequeño cuarto abrí la puerta de este. . . más bien, estuve a punto de hacerlo pero mi mano tembló, hace mucho no hacía esto y ni siquiera tengo la suficiente fuerza de voluntad para ir aquí. . . Suspiré y tomé la manija, ésta es fría de un color dorado, la giré y el sonido del rechinar de la puerta hace que mis nervios aumenten. Trato de hacer demasiado ruido al cerrar ésta.
