Capítulo 10

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Loona sentía un terrible dolor de cabeza. Casi tan malo como la vez que intentó taclear a unos niños de trece años en un partido de fútbol americano en la escuela una vez. Sacudiendo su cabeza para despabilarse, Loona trató de levantarse solo ver que estaba inmovilizada, excepto la cabeza y la cola. Alertada por esto, trató retorcerse más, pero no pudo. Cuando su visión se aclaró, notó que estaba en una especie de habitación de hotel polvorienta y podrida, con parafernalia barata de Halloween.

― ¿Qué carajo? ¿Dónde estoy?―se preguntó Loona sentándose en la cama sin sábanas en la que estaba. ―. ¿Papá? ¿Tía Millie? ¿Tío Moxxie? ¡¿Chicos, dónde están?! ¡Vamos, esto no es gracioso!

La puerta de la habitación se abrió, pero en lugar de su familia, eran tres extraños a los que nunca había visto antes pero que dejaban ver una mala vibra de ellos, del tipo que hacía que su cabello se erizara. Inclinándose hacia atrás con un leve gruñido, Loona miró al diablillo bajito con cicatrices con el ceño fruncido, la perro infernal fumando un cigarrillo y otro diablillo con un solo cuerno que le sonreía.

― ¿Disfrutaste tu siesta, niña?―preguntó el diablillo de un cuerno, inclinándose hacia adelante pero lo suficiente para que Loona no pudiera morder su cara sonriente. ―. No querría que estuvieras demasiado cansada para cuando tu papá venga a recogerte. 

― ¡¿Quienes son ustedes?! Espera, ¿son pervertidos? Porque en serio, esa mierda está mal a pesar de ser el Infierno.―preguntó Loona.

La sabueso resopló.―Bueno, tal vez Austin lo sea. Suele follarse cualquier cosa con esa polla que tiene. 

―No vamos a tener sexo contigo, Loona, pero vamos a joder a tu padre cuando llegue.―anunció el diablillo de un cuerno mientras crujía los nudillos. ―. Hemos esperado años para vengarnos de él. Él va a pagar por la miseria y el dolor que nos ha causado... Y tú serás la clave para lograrlo. 

―Sí, ¿qué tal si tomas ese otro cuerno tuyo y te lo metes en la nariz? No te ayudaré a lastimar a mi papá.―gruñó Loona. Ladró un par de veces y trató de saltar sobre los tres, pero el diablillo de un cuerno la golpeó con un revés. Ella gritó por el golpe, pero contuvo las lágrimas mientras se lamía el labio cortado. ―. ¿Solo por eso? ¡Te voy a morder la polla!

El diablillo más bajo golpeó a Loona en la cabeza con el puño y forzó su rostro hacia el cojín mohoso. ―¡No estás en posición de hacer nada, pequeña mierda!―Los ojos de Loona se abrieron al escuchar eso. ―. ¿Entonces, por qué no eres un buen cachorrita y...? ¡AAGGH!

El diablillo maldijo y retrocedió mientras sostenía su mano a la que ahora le faltaban dos dedos. Loona los escupió y gruñó. ―¡No me llames pequeña, imbécil!

―¡Hija de puta! ¡Te mataré!―gritó el diablillo sin dedos sacando un arma y apuntándole a Loona. Ella jadeó y cerró los ojos, pero no hubo impacto ni dolor cuando se disparó el disparo... Al abrir los ojos, vio que el diablillo de un cuerno, enojado y gruñendo, había derribado al otro diablillo al suelo. ―. ¡¿Qué mierda, Marcus?!

― ¡Idiota! ¡No nos servirá si muere ahora!―le gritó Marcus pateándole en el estómago. ―. ¡Guarda tus balas para Blitzø cuando llegue! ¡Puedes matar a la mocosa cuando terminemos con él!―Hizo un gesto hacia la puerta.―. Iba a ponerte a vigilar, pero olvídalo. Haré que Hiryu ocupe tu lugar y él vigilará a la chica con Kary. Solo prepara las armas. ¡Al menos puedo confiar en que él no actuará como un niño!

―Eso es porque el maldito bastardo de ojos entrecerrados no habla nunca.―refunfuñó el otro diablillo levantándose y se dirigía hacia la puerta. ―. El imbécil actúa como si fuera un jodido personaje mudo de anime con esa elegante habilidad con la espada. 

Regresando en el tiempo (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora