Cuidando de tí♡ (WangXian) ♡

Cap: 1 ♡ Volviendote a ver.

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       ♡𝖁𝖔𝖑𝖛𝖎𝖊𝖓𝖉𝖔𝖙𝖊 𝖆 ver♡       
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Desde los lejanos días de la juventud,  desde el primer momento en que Lan WangJi Miró a Wei WuXian siendo tocado por el suave resplandor de la Luna, quedó totalmente enamorado, su corazón se agitó ante la dulce sensación del amor, y quedó prendado de una persona a quien considera su alma gemela;

Alegre, extrovertido, ejemplar, maravilloso. Wei WuXian lo era todo, su risa, sus palabras, su forma de ser y pensar. Él era ese mar de emociones que agitaba las aguas tranquilas del corazón del segundo amo Lan, Lan WangJi.

Lastimosamente en aquellos días, su inseguridad y falta de comunicación, le hicieron las cosas difícil, y a pesar de apreciar todo los buenos momentos que pasaba con Wei WuXian, y todas aquellas cosas que le regalaba como buen símbolo de la amistad, jamás tuvo la oportunidad o el valor de confesarse.

Wei WuXian para él, era con el polvo de estrellas, brillante e inalcanzable. Un ser indómito que jamás, alguien como él tendría entre sus brazos. Indomable como las olas de los mares y el viento.

Por que siempre Wei WuXian se le escapaba de las manos cuando estaba a solo unos centímetros de alcanzarlo. Y lo vivió en carne propia cuanto dió inicio a la guerra en el mundo de la cultivación, perdiendo a Wei WuXian en solo un pequeño descuido.

Con un Wei WuXian desaparecido, y un Lan WangJi buscando hasta en los rincones del mundo, por las altas montañas y lejanos ríos, pero solo tuvo como respuestas ecos vacíos sin llegar a nada, en un bucle infinito de preocupación constante, sobre si seguir ayudando en los asuntos de sectas o buscar a su amigo.

Cuando al final logró verlo de nuevo, rodeado de aire siniestro, con cuervos sobre volando los cielos oscuros, y el fuego consumiendo todo.  Fué, como si todo lo que antes había visto, fuera solo un sueño, un sueño bonito que quedó atrás, y el ahora, la realidad le resultaba tan ruin, cruel y desesperante.

— Wei Ying... No volvió a gusu conmigo —.

Susurró para si mismo, mientras daba la vuelta con los labios fruncido, siendo incapaz, de proteger o traer a Wei WuXian a su secta para protegerlo del mundo.... Los días pasaron, y la noticia de que Wei WuXian había abandonado el Clan Jiang para proteger los remanentes Wen agitaron el alma de Lan WangJi como un vendaval escalofriante.

Esta vez, Wei WuXian se había ido lejos y se veía como el enemigo de todos.

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Después de lo que sería unas semanas, Lan WangJi siguió con sus deberes de secta, atendiendo al llamado de varios aldeanos que de seguro ignorarian los demás, pero él no. Él no era así, por que haría todo lo posible para ayudar, yendo siempre donde está el caos.

Le sorprendió bastante el echo de que el pedido fuera cerca de los pueblos bajos de YiLing, lo más cerca al Monte Luang Zan, en donde recidía el Patriarca de YiLing. Él mismo que dió muerte a la mayoría de los Wen usando como arma la famosa flauta de bambú resentido; ChenQing y un ejército de cadáveres que comandaba con siniestras melodías, y con la misma quien protegió a quienes eran inocentes, siguiendo la justicia que dictaba su corazón.

Estaba tan distraído en sus pensamientos que no se dió de cuenta cuando chocó con alguien, rápidamente tomó del brazo a la otra persona para que no se cayera, y cuando estaba a punto de disculparse, la sorpresa se vió reflejada  en sus ojos dorados como el sol mismo.