El chico de los faroles.

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"En cada reencarnación, dejaste una huella en mi frente"

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"En cada reencarnación, dejaste una huella en mi frente".
一A-lin (If heaven has compassion)一

Capítulo único.

"Qué mala suerte", es lo primero que piensa cuando se encuentra frente a un guzheng. Alza la mirada, su padre se cruza de brazos y frunce el ceño ante su duda. No importaba cuántas vidas pasaran, su padre era igual de autoritario e interesado, no entendía cómo su madre igualmente lo amaba profundamente, y no importaba en qué vida fuera.

¿Por cuántas vidas había pasado?¿Cinco, diez?

一Temari.一 suspira y vuelve a clavar la mirada en su padre.一 ¿Qué estás esperando?

Da un suspiro pesado, y comienza a rozar las cuerdas del guzheng delante de los ministros, quienes la veían con genuino interés. Siendo una princesa de una familia sumamente respetada, se ve en la obligación de captar la imagen de la "esposa perfecta". Sus hermanos menores, Gaara y Kankuro, la miraban con algo de lástima.

"En mi siguiente vida, espero ser un hombre", pensó mientras su para nada practicada melodía resonaba en cada rincón del salón. Era una melodía dulce, suave y relajante, una melodía que le habían enseñado en sus vidas pasadas. Sonríe tenuemente al recordar a ese chico.

En ninguna vida habían podido estar juntos, no sabía si el destino era cruel e injusto, o si simplemente hacía su trabajo. Su corazón  no latía con frenesí al recordarlo, al contrario, le brindaba una inexplicable calma, había desarrollado hacia él un amor maduro, y jamás olvidaría lo que él le hizo sentir en un principio.

一Maravilloso.一 dijo el primer ministro casi en un susurro hacia el emperador.一 Su hija tiene un maravilloso talento, seguramente lo heredó de su difunta madre.一 Temari baja la mirada ante estas insensibles palabras, aunque sabe que no eran con intención.

En su primera vida, al menos la que recuerda, ella era la hija de un clan importante, su padre era un ministro poderoso, y ella se había enamorado perdidamente del estratega militar Sun Tzu, quien fue un personaje famoso en la historia de la gran China. Claro que mañana más tarde se enteraría que ese no era su verdadero nombre.

Aún lo recordaba, aparentaba ser un hombre mayor, sabio, e inteligente. Temari juraba que él sería seis o cinco años mayor que ella en ese entonces, hasta que lo atrapó despojándose de un bigote falso y de la túnica especial que se le había sido concedido. Había resultado ser un muchacho tres años menor que ella, maduro, y listo.

Shikamaru Nara.

一Gracias por venir.一 despidió el emperador a sus invitados, y mientras tanto, sus hermanos comenzaron a acercarse discretamente hacia ella. 

Recordó todas las veces que tuvo que renunciar a su amor por él, sin mencionar que en algunas vidas había sido ejecutado. Amar a alguien que fuera de menor rango, o de diferente clase social, era totalmente un pecado. Por eso, con la madurez que había adquirido en esas vidas, tomaría decisiones cautelosas en cuanto lo viera.

El chico de los faroles II ShikaTema.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora