After All [Drarry] [OneShot]

After all

Draco no podía recordar en que momento el elegido y el habían comenzado una amistad, tal vez fueron aquellas pequeñas charlas entre clases o las sonrisas que se lanzaban a través del comedor, con el tiempo todos los insultos en los pasillos se habían reducido a nada y la mayoría de los estudiantes lo había notado, ¿Draco y Harry, amigos?, pero realmente nadie lo cuestiono, todos se acostumbraron, incluso los profesores.

El momento en el que Draco se dio cuenta de que lo que sentía por Harry iba más allá de la amistad fue en quinto, en definitiva había crecido unos cuantos centímetros desde cuarto, ¿Podía alguien ponerse bueno muy rápido? Si, Harry Potter era la prueba viviente de ello, y algo que no podía negar era la forma en la que se le veía el uniforme de Quidditch, tal vez eran sus alocadas hormonas de adolescente pero había algo en el azabache que lo tenía vuelto loco.

El rubio estaba en un constante debate consigo mismo, no podía sentir nada por él, ¿Qué dirían sus padres?, mucho había costado ya que se enteraran que eran amigos, pero los sentimientos no funcionaban así, entre mas intentaba esconderlos mas fuertes se hacían y el tener que verlo todos los días no ayudaba a su confundida mente, pasaron semanas en donde Draco pensaba si valía la pena el rechazo de su familia por amor, ni siquiera sabia si el ojiverde realmente sentía lo mismo, pero el lago negro era su lugar tranquilo, siempre que estas cosas comenzaban a atormentarlo solía salir a las orillas a pensar con claridad o solo a relajarse un poco.

Harry por otro lado notaba los cambios repentinos de su amigo y estos le preocupaban, un día se veían y al otro Draco lo evitaba, con el tiempo empezó a notar sus escapadas nocturnas, verlo en el lago llorar por motivos que desconocía le traía cierto dolor en el pecho, una sensación que no conocía, ¿Lastima?, pero temía que lo que sentía fuera otra cosa así que no se atrevía a confrontarlo, aunque anhelaba que el también lo sintiera.

Pero un día sucedió, esa tarde Draco se sentía peor de lo normal, se había enterado de los planes de los mortífagos contra Harry y por más que intento detenerlos o retrasarlos un poco la idea en definitiva no le interesaba a su padre, estaba llorando en la orilla del lago, a veces lo único que quería era escapar de todo eso, de su padre, de Voldemort.

Mientras sus pensamientos se hacían cada vez más grandes y comenzaban a consumirlo pudo escuchar unos pasos detrás de el, su primer pensamiento fue que algún prefecto lo había encontrado, el rubio, cansado y derrotado de batallar consigo mismo se levanto limpiándose las lágrimas con la manga de su túnica, listo para que le restaran cincuenta puntos a su casa pero a quien vio parado fue a Harry.

"¿Draco?, ¿Estás bien?" murmuro el azabache, la preocupación era obvia en su rostro, tenia el ceño medio fruncido y los ojos un poco llorosos, tal vez era la situación o solo porque no tenía los lentes puestos, esa noche sus ojos brillaban más de lo normal, casi nunca lo veía sin lentes.

"Si, estoy bien" intente decir con mi voz mas seria, pero está se corto a media oración.

"No, no lo estas, ¿Qué pasa?" lo único que esto provoco fue que las lagrimas que había estado conteniendo por un rato salieran, caí de rodillas al pasto, no podía pensar en la idea de que algo le pasara a Harry, a mi Harry.

Entre sollozos le conté el plan de mi padre y los mortífagos, el contrario frunció el ceño

"Pero yo puedo derrotarlo, soy el elegido" dijo con esa sonrisita egocéntrica de siempre

"No, no puedes, tienes solo 15" intente recordarle, siempre se quería hacer el héroe y no parecía recordar que fuera de todo era solo un niño

"Bueno, y a todo esto, ¿Cuál es la importancia?, haré lo que pueda por salvar a la gente y si no puedo..."