Mal humor

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Narra Grabrielle

Poco después de que mi madre se fue las peleas entre mis hermanos menores comenzaron de nuevo, los separé y Antonella mi pequeña hermanita despertó, la escuché llorar y subí al cuarto, la cargue y palmee su espalda hasta aquel dejo de llorar, baje con ella en brazos y la dejé en una pequeña mesita para bebés le puse los seguros y calenté la comida que mi madre me había pedido,una vez que mis hermanos comieron levanté los platos y los lave, dormí a mi pequeña hermana y les ayude a hacer la tarea a mis otros dos hermanos, escuché la puerta principal abrirse de golpe y me sobrestalte, escuché la voz de una mujer retando y diciendo malas palabras.. espera.. era mi hermana mayor Lucia, baje las escaleras y la mire

Lucia: sei fottutamente stupido -saque unas cosas de mi bolso- ahg

Gabrielle: ¿Quién es un estúpido? -la mire sacando sus cosas- ¿Y por qué estás tan enojada?

Lucia: cállate -lo empuje haciendolo a un lado y subí más escaleras-

Gabrielle: -la mire y la seguí- pero.. ¿Estás bien? -dije preocupado- yo solo..

Lucia: -me di la vuelta ya estando enfrenté en el marco de mi puerta y lo mire molesta- deja de meterte en cosas de mayores mocoso, lárgate y no quiero escucharte el resto del maldito día -le azote la puerta-

Narra Grabrielle

me sobresalte con el sonido de la puerta y suspiré, baje mi vista al piso y baje las escaleras, lave los trates que había sucios y recogí los juguetes de mis hermanos para que cuando llegara mi mamá no tuviera que hacer eso, se legaron las 8 de la noche y yo hice algunos sandwich y un poco le cuidado con los plátanos que mamá había traído hace algunos días, subí las escaleras y saqué a mi pequeña hermana de la cuna, luego llame a mis otros dos hermanos para bajar a cenar, me detuve frente a la puerta de mi hermana mayor y estuve a punto de tocar pero me arrepentí.. tal vez ella seguía sin querer hablar.. no había dicho palabra alguna desde que llegó y tampoco había hecho ningún ruido, decidí no molestarlas y mejor baje las escaleras, nos sentamos al comedor y comenzamos a comer... Al terminar fui a dejar a mi hermana a su cuna y acompañe a mis hermanos a la cama, salí y sabe las escaleras nuevamente para empezar a recoger la mesa, en eso escuché el rechinar de la escalera y pensé que alguno de mis hermanos se había levantado, me di la vuelta y vi a mi hermana mayor parada justo enfrente mío, su cabello negro y ondulado estaba hecho una esponja, sus ojos estaban rojos y un poco hinchados, como si hubiera llorado mucho, su naríz parecía la de Rodolfo el reno de lo roja que estaba, pensé que me pasaría de largo pero solo me dedico una pequeña sonrisa

Lucia: veo que hiciste la cena temprano

Gabrielle: bueno.. tenía que dormir a los niños.. ya sabes cómo se pone mamá si no se duermen temprano - reí levemente- ¿Quieres que te haga algo de cenar?

Lucia: - sonreí levemente- me encantaría

Gabrielle: bien solo recojo esto y.. - sentí si mano en mi hombro y la mire- ¿Que pasa?

Lucia: quería pedirte disculpas.. no debí haberte hablado así en la mañana.. tú no tenías la culpa de nada

Gabrielle: Descuida - reí- fue mi culpa no debí haber preguntado en tan mal momento -le prepare un sándwich y un licuado de fresa, mi madre siempre se lo hacía cuando se sentía mal-

Lucia: gracias.. por la cena - reí y suspiré- lo cierto es.. que el idiota de Roberto termino conmigo, por una mujer tan fea

Gabrielle: - solté la risa al escucharla- puedes que tonto, no sabe de lo que de pierde

Lucia: - sonreí- nunca tengas novia.. porque aparte de que me pondré muy celosa y querré proteger a mi hermanitos menor.. no quiero que te hagan daño

Gabrielle: Descuida.. nadie se fijara en mi - reí-

En eso la puerta se abrió y entro aquella mujer de cabello negro ondulado hasta la cintura, llevaba unas bolsas sobre sus manos con evidente cansancio, Gabrielle se levantó de inmediato y le ayudo con aquellas bolsas, entraron a la cocina y le ayudo a sacar aquella productos de las bolsas

Francesca: ¿Sabes que le pasa a tu hermana? -lo mire- ha estado muy callada y sería desde que llegué, ni siquiera me vino a abrazar

Gabrielle: yo.. -mire a mi hermana y ella negó con la cabeza, luego mire a mi madre y desvíe la mirada al suelo- no.. no tengo idea mamá

Francesca: Mio Dio -puse una de mis manos en mi frente- ay no puede ser como pude ser tan tonta

Gabrielle: ¿Que pasa? -la mire-

Francesca: tenía que traer leche en polvo para Antonella -mire el reloj sobre la nevera en la cocina- apenas son las 8:30 iré por ella - escuché a la bebé llorar- ay no

Gabrielle: yo voy por ella.. aún tenemos la bicicleta de mi hermano Fabián

Francesca: es de noche Gabrielle no puedo permitir que.. -me interrumpió-

Gabrielle: estaré bien mamá conozco el camino de memoria.. no te preocupes

Aquella mujer se lo pensó por unos segundo pero al escuchar el llanto de la bebé en aquella habitación se resigno cerrando los ojos y se acercó a su hijo

Francesca: ten cuidado Per favore.. no te tardes

Gabrielle: no lo hare - bese su mejilla y baje al pequeño ático que teníamos, desempolve un poco aquella bicicleta y la saqué, mi madre me dio el dinero y lo guardé en una pequeña servilleta dentro del bolsillo de mi pantalón, entonces empecé mi camino, escuché los ladridos de mi perro chousnky por un rato hasta que se dejó de escuchar, entonces supe que ya estaba lejos de casa-

Tú Y Solo TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora