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Salgo de la cafetería con dos cafés en mano, uno para Hoseok y otro para mi, ambos nos habíamos despertado muy temprano solo para llevar a Taehyung al aeropuerto. Necesitábamos esto.

—Café helado para ti.— extiendo el vaso en su dirección.

—Gracias Yoon.— seguimos avanzando por la acera, el día estaba fresco.— supe que acompañaste a Jisoo el sábado pasado.

—Si, fue demasiado aburrido, no se porque tengo que ir.— niego mientras doy un pequeño sorbo a mi cafe.— se supone que solo tengo que disfrutar la fiesta, ¿por qué tengo que ver yo todo eso? — la risa escandalosa de Hoseok no tardó en escucharse.

—Por qué a ella le gusta saber tu opinión. — dijo con obviedad.

—En fin, mi traje aún lo tienes tú.

—Oh, cierto. Recuérdame traerlo mañana.

—Uhm.— cuando llegamos al estacionamiento de la empresa me despido de Hoseok y sigo caminado hasta llegar a mi piso.

—¿Señor Min?. — la voz de Ryujin hace que me detenga antes de entrar a la oficina.— ¿Qué hace aquí? — alzó una ceja confundida.

—Voy... ¿a mi oficina?

—Señor hoy iniciaban sus vacaciones. Parte de su trabajo y pendientes fueron traspasados al señor Kim Namjoon y al señor Park Chanyeol. — ladea su cabeza.— Usted... usted las había programado, ¿lo olvidó? — la miro confundido.— si aquí. — sacó su libreta de apuntes y señaló el día de hoy.— aquí marque: inicio vacaciones señor Min.

—¿Yoongi? — Namjoon sale de su oficina junto con su secretario.— Creí que hoy comenzarías tus vacaciones.

—Okay, todo el mundo sabía que yo comenzaba mis vacaciones, menos yo.

—¿Quién olvida sus vacaciones?

—Al parecer yo.— rasco mi nuca avergonzado.

—Creí qué tal vez irías junto a Taehyung, supe que logró llamar la atención de una marca reconocida.

—¿Sabias del viaje?

—Por supuesto, es mi deber saberlo. Se llevó a 5 de nuestros chicos, como habían mencionado que su amigo estaba en New York y tus vacaciones iniciaban hoy, di por echó que irías con ellos.

¿Acaso yo podría...?

Estuve apunto de decir algo cuando siento mi celular vibrar, lo saco del bolsillo para ver de quien se trata y la palabra Jisoo se iluminó en el.

—Es Jisoo, bien, estaré en mi oficina.— dije mirando a ambos.

—¿Te quedaras a trabajar? — pregunta el moreno.

—Solo terminaré lo de ayer y me voy.— da un asentimiento y sigue caminando junto a su secretario.— Ryujin, puedes traerme algo de comer. Lo que sea esta bien.

—Si señor.— dijo para luego desaparecer por el pasillo.

Entro a mi oficina y vuelvo a marcar el número de Jisoo, no pasan ni cinco segundos cuando atiende la llamada.

—¿Qué ocurre Jisoo?

Yoongi~ — ruedo los ojos al escuchar la manera en que me llama.

—¿Qué sucedió? — pregunto mientras me tiro en el sofá más largo que tenía en la oficina.

¿Conseguiste las flores que te pedí?

Si Jisoo, ya las conseguí.— cierro mis ojos, estaba cansado con el tema de la boda.— llegarán ese mismo día, no te preocupes.

¡Puedes creer que ya sea este sábado! — su entusiasmo no me contagia en lo absoluto.

Vuelve A Mi  || YMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora