CAPITULO 3: EL DEBER DE UNA (FALSA) NOVIA

119 27 24
                                    

Si pudiera retroceder en el tiempo lo haría. ¿Maldición, quien no lo haría? En algún momento todos deseaban hacerlo con tal de hacer o evitar algo, no tenía pruebas pero tampoco dudas.

En su caso, este era el momento.

—¿Llevármelo a casa? —

No sería codiciosa, se conformaría con el tiempo suficiente para evitar el incidente de la estación o borrar la palabra "novia" de su disco duro.

— Sí. Para asegurarnos de que su pareja no tenga algún problema que hayamos ignorado lo tendremos en observación hoy, pero mañana podrá regresar con él —

Ohmierdaohmierdaohmierdaohmierdaohmierdaohmierdaohmierdaohmierda

— ¿No es muy pronto? ¡Casi se parte la cabeza! ¡Debería estar internado hasta que se aseguren que no le pasara algo más! —

Bien, tenía que actuar como una loca histérica...bueno, en realidad lo estaba, ¡pero eso no era lo importante! No, lo realmente importante era que ese viejo estaba arrojando a Kim Dokja a la calle.

¿Llevarlo a su departamento? Imposible.

¿Por qué debería llevarse a un desconocido con ella? No se trataba de un animal callejero de lo que hablaban, ¡era una persona!, una que no estaba en sus plenas facultades física o mentales.

... ¡Y ni siquiera tenía mascotas! ¿Cómo esperaban que cuidara de otro ser vivo si apenas podía con su vida? ¿¡Y si recuperaba su memoria rápido y terminaba pensando que lo secuestró!? Oh no, ya contaba con cargos (falsos) por plagio, no quería añadir secuestro o chantaje a su historial.

—Señorita, le puedo asegurar que su novio no se encuentra tan mal como piensa—

Nononononononono ¡él se encontraba mal! ¿Cómo podían abandonar a un paciente con amnesia tan fácilmente? ¿Qué clase de doctor era?

—¿Qué pasa con su memoria? —

—La recuperara más rápido si está rodeado de personas familiares—

¡Otro motivo más para estar en el hospital y no con ella!

Kim Dokja necesitaba quedarse hasta que recuperara su memoria y pudiera contactar él mismo a su verdadera familia. ¿Qué podía hacer ella? ¡Nada! Lo habría intentado, si no fuera porque el único medio para hacerlo había abandonado este mundo esa noche y sin posibilidades de recuperar su contenido.

—Entiendo que este muy preocupada por su pareja, pero créame que estará mejor con usted que con nosotros—

Nonononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononononono.

—P-pe-pe-pe-pero y-y-y-y-yo—

Tenía que resolver el asunto de algún modo ¡AHORA!

¿Qué opciones tenía que no contaran con llevarse al hombre? .... ¿Porque pensaba de ese modo? ¡Llevarse al idiota definitivamente NO era una opción!

1- Decirle la verdad al doctor: Revelar que en realidad no era la novia de Kim Dokja, sino una simple desconocida-conocida (¿?) ...acompañante de cena (¿?).

Aunque levantaría sospechas porque sabía varios datos de él (¡Tenía que darlos para que lo atendieran, de acuerdo! ¡Fue coincidencia y mala suerte que los supiera!); si mencionaba eso aún podría delegarle el cargo o pensaría que era una novia irresponsable que no quería cuidar de su pareja, en el caso más extremo creerían que se trataba de una acosadora...pero no podrían hacer nada contra ella, ¿verdad?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 15, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Entre historias y memoriasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora