Naruto Okami: El Legado de los Dioses

capítulo 13

Naruto lentamente despertó de un largo sueño, un sueño que sintió tan distante y a la vez tan real, sentía el aire en la cara, el aire puro en sus pulmones, el pasto en su espalda, una sensación de paz como nunca surcaba su cuerpo.

Miro a sus lados, encontrándose con espadas, lanzas, hachas y demás armas, todas armas de gran poder, con gran historia y una inimaginable leyenda detrás suyos.

UNLIMITED

W~~~~~ONS

W~R~D

Observo a su alrededor con interés.

Observo lo que le rodeaba, sabía que estaba soñando pero también sabía que estaba más allá de un simple sueño.

Y sus sueños últimamente habían sido raros, desde que había descubierto la integración de nuevos parámetros a su Trazado hacia unos cuantos años atrás, había estado teniendo sueños muy diferentes a los usuales.

La mayor parte de los días soñaba sobre un incendio en una ciudad y una vaina de color dorado con detalles azules, Avalon, mientras que en otros casos soñaba con espadas algunas veces con escudos incluidos.

Ahora estaba soñando algo mas allá de lo normal porque soñaba batallas. Escenarios de batallas, guerras y tal. Escenarios muy gráficos y únicos pero ahora era diferente porque era consciente de si mismo en vez de ser un simple espectador, ahora podía ser consciente de que estaba en un sueño y por sobre toda la cosa el lugar en el que se encontraba le llamaba mucho la atención.

Tardo un momento para darse cuenta de exactamente en donde se encontraba. Estaba más allá de su mente, estaba más allá de un simple sueño o una simple ilusión. Estaba en su mundo interior.

Estaba en su Esfera de Realidad… pero algo era diferente.

Había estatuas.

Y cada una tenía un arma a la mano.

Todas estaban portados una arma en especial en una pose de orgullo y tal, caballeros con sus espadas apuntando al cielo, lanceros con sus lanzas en posición de combate, escuderos en posición para protegerse, jinetes en caballos, arqueros apuntando a un objetivo lejano y demás estatuas hechas de mármol blanco apuntando de manera aleatoria pero él podía ver que imperceptiblemente miraban hacia una colina en especial, una que le llamo la atención ya que no la había notado antes.

Así que con indecisión pensó en dar un paso y al hacerlo, comenzó a caminar acercándose a esa colina tomando nota que en esta tenia hierba muy fina solo que era de color…Naruto parpadeo nuevamente… no podía ver el color, algunas veces era morado o negro o dorado o rojo y demás colores curiosos pero nunca era fijo.

Decidió no prestarle atención y continuo su camino tomando nota de otras varias estatuas pero estas eran diferentes reconociendo a los Servants de la cuarta guerra del santo grial aunque faltaban Archer y Caster, no se preguntó por ello pero sentía que el después lo descubrirá. Pasando a través de las estatuas de Lancer, Berserker, Assassin y Rider finalmente llego al final de la colina.

—….Avalon…pero ¿eso es…?

Lo que Naruto estaba viendo era una estatua de una mujer que el reconoció como la Saber y Servant Arturia Pendragon pero había un detalle que se le escapó a Naruto.

Excalibur era diferente… se miraba más grande, más decorada y sabía que era más poderosa.

La reconoció sin problemas.

—Proto Excalibur

Caminando por sobre la final de la colina tomando nota de un árbol con hojas de igual color indefinido y observo en un pedestal de piedra a la representación de su mundo interno de la legendaria vaina Avalon.