|En Corrección|《Blue Keeper: Huggy Wuggy x Lectora》 (Poppy Playtime)

《Capítulo 1: A New Work》

Nota:
Si el cabello del Reader es largo,llevarán una moño tipo cebolleta o como se los colocan las bailarinas, si es corto llevan ganchillos para los cabellos rebeldes.

(P.O.V ___________ ):

Eran en aproximación las cinco de la mañana, mi habitación estaba en su totalidad a oscuras, aún con cierto sueño me levanté de la cama a desactivar la alarma de mi reloj sobre la mesita de noche, termine de gastar el tiempo sobrante y me estire un poco mientras parpadeaba de forma constante, sabia que aún era demasiado temprano, y como deje todo preparado la noche anterior estaría llegando casí a las seis y media a la compañía playtime.Co, pero, estaba emocionada, quería ver cada rincón de la instalación mientras cumplía mis tareas en la jornada laboral, aún y si es limpiando oficinas y sectores donde esta la maquinaria; quería conocer el hogar de mi "compañero de Cuarto".

Me dedique a arreglar mi cama y tomar a mi "compañero", o bueno, mi peluche, como todos los días le di un suave beso y le agradecí por cuidarme toda la noche, siempre lo colocaba al lado del reloj para tener una vista clara de él y así no complicarme en buscarlos para salir de la casa.

El resto es la historia es mi rutina diaria: Elegir ropa adecuada, caminar al baño, ocuparme de la higiene y mis necesidades básicas, peinarme, colocarme un poco de maquillaje al grado de que se vea natural y revisar que todo este en orden; aunque trabajaré como personal de limpieza es recomendable tener una buena presencia, siempre seré requerida para limpiar en diversas zonas, lo que implica cruzarse con personas a menudo.

Antes de salir del baño medite sobre un último detalle que me faltaba, me acerqué a mi pequeña repisa cerca de la ventana y miré la botella de cristal rosa, este perfume había sido un regalo de mi madre, me termino gustando tanto su olor dulce a lavanda que termine comprando el mismo ejemplar cada que se me acaba; me habia quedado con la botella original, tenía un valor sentimental asi que solía rellenarla.

Con una pequeña sonrisa nostálgica me coloqué la fragancia y seguí con la rutina mientras pensaba en mi madre, Amanda Brow Petergas, y en conjunto, sobre mi familia. Para cualquiera en una clase media alta que mis padres me mandaran casi cinco estados de distancia era algo horrible, soy joven, no estoy casada, ni tengo familiares a los alrededores; recuerdo las críticas a la decisión que habíamos tomado los tres y en el como no creían que podría sobrevivir sola. La gente se equivoca a veces.

Mi familia no es pobre pero no tenemos una situación fácil, estamos por debajo de la clase media por así decirlo, era normal para mi ver a mis padres trabajar todos los días y quedarme con mi tía Cecilia, cuando tuve la edad suficiente para empezar a ayudar empecé a desempeñar el roll de ama de casa, no me molestaba en lo absoluto, mis padres me orientaban de una forma agradable sin gritos o burlas si me equivoca y siempre me agradecían hasta los pequeños detalles como meter a lavar la ropa o limpiar los platos; nuestra situación recaía en mi nacimiento ya que fui producto de un embarazo a muy temprana edad, pero la diferencia esta en que mis padres asumieron la responsabilidad y con pesar, dejaron todo para cuidarme y educarme.

Mi Papá, John Forger Pretergas, era mecánico, no muy bien pagado pero ganaba lo suficiente para llegar a fin de mes, y mi mamá además de ocuparse de la casa y de mi, solía trabajar en las tardes como mesera, pocos eran los momentos en que estábamos juntos pero eran los que más apreciaba y recuerdo con cariño.

Tenía lo suficiente para los estudios y me dedicaba a sacar las mejores notas con la ayuda de mi madre. Mi tía Cecilia fue y es una pieza importante en los primeros años de mi vida, ella apoyo a mi madre siempre como podía, a mi padre le tenía mucha estima y respeto, cuando me cuidaba siempre me consolaba en los momentos en que me sentía sola por su ausencia debido al trabajo. Es una mujer carismática y muy risueña, siempre positiva y optimista, es como un rayo de sol a donde quiera que vaya, ella trabajaba en aquellos tiempos como maestra de preescolar; Y no esta de más Resaltar que ella fue la que me regaló en una navidad a mi pequeño Huggy.