¿Creíste que era el final? Apenas esta comenzando. Lo que al principio parecía una luz que guiaba a un final feliz se convirtió en una oscuridad ahogada que podría poner en riesgo un amor como el de ______ Miney y Joel Pimentel, tantos secretos, tan...
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Miles de cosas se abalanzaban sobre mi mente en este momento, las cosas que ella había hecho y las cosas que el dijo azotaba mi mente como un torbellino de malas decisiones y malas ideas, podría creerle a ambos sin ningún problema pero no sabia como hacer eso, no sabia como buscar y encontrar la forma de darle la razón a ambos. Amaba a mi madre pero no amaba a Lukyan, Lukyan me gustaba y eran cosas diferentes, amar va mucho más allá de atracción física y creo que de no haber sabido eso hace mucho tiempo me hubiese confundido.
Ahora estaba atrapada aquí y no sabía que hacer...
Tenia tanto miedo pero Lukyan lo dijo, si no lo hago no podre saber quien en verdad son ellos y no hay nada que quiera más que descubrirlo.
— Alguien lo metió en mi mochila... — murmure.
El oficial entrelaza sus manos sobre la mesa y me mira, — ¿Fumas Marihuana?
Negué, — No, no fumo marihuana.
— ¿Ingieres algún tipo de droga?
— Puede hacerme exámenes si es lo que quieres. — refute molesta.
— ¿Has visto a alguien en tu familia hacerlo?
Niego por décima vez en la noche, — No, mi familia y yo somos normales no... no hacemos eso.
— ¿De que trabajan tus padres, Max?
— Mi mamá es abogada y mi papá es empresario. — afirme.
Asiente, — Muy bien, dame tu nombre completo para llenar el formulario y que luego te tomen exámenes.
Volqué los ojos, — Maxine Dione Pimentel Miney.
La mirada del oficial a su lado se levanta deprisa y me mira, — ¿Pimentel Miney?
Esta era la oportunidad de la que estaba hablando Lukyan.
— Si, ¿Tiene algún problema con eso oficial Harrelson? — cuestione leyendo su carnet.
Ríe, — Vaya... en los veinticinco años que tengo en la policía jamás creí ver esto, vendrán cosas peores dice la biblia. — murmura anotando mi nombre.
El otro policía sonríe, — creo que estarás unos días aquí hasta que se investiguen a tus padres.
Fruncí el entrecejo, — ¿Qué es lo que les sorprende tanto? ¿Por que investigara a mis padres?
