Eternally

Parte única. ❤Eternally ❤

El hombre de cabellos  rubios y ancha espalda sosteniendo un aspecto intimidante ingresó a paso lento  al bar estilo americano que se encontraba a la vera  de aquel camino.

Algunas personas que allí se encontraban voltearon a verlo fugazmente y otras ni siquiera se habían percatado de su llegada.

Él sin embargo,  estaba muy ajeno a todo aquello.
Se veia serio y sombrío. Sus ojos grises, la nariz afilada y su  tez ligeramente bronceada amoldaban sus perfectas facciones otorgándole un aura feroz y audaz.
Sin embargo una vez que se acercó a la barra, su semblante se suavizó dejando ver una leve sonrisa.

El joven de cabellos rojizos al verlo más cerca, ya que lo había notado al  llegar,  le regaló una tierna sonrisa amistosa.

-Han...amigo!!!- le dijo primero, dejando a un lado el vaso que secaba. Le tendió la mano en un fuerte apretón.- como has estado?

-Jehyun...hermano..-le correspondió estrechando su mano de la misma manera. .- ...como siempre..-tensó un poco su sonrisa a un lado.-veo que tú sigues igual...-miró alrededor con sutileza.-...y que no has cambiado nada en este lugar...y te lo agradezco...-esto fue dicho casi en un susurro.

Jehyun parpadeó levemente asintiendo sin perder su tierna sonrisa.

-hay tantas historias aquí que remodelar o cambiar,  aúnque más no sea algún mueble de lugar, sería como borrar los recuerdos que viven aquí....-sus palabras estaban evidentemente cargadas de mucha verdad para ambos. Jaehan asintió en silencio.  -...seguiste el consejo de HanGyeom de mudarte o sigues viviendo allí? .-le preguntó con un toque leve de curiosidad e interés. Conocía al rubio desde sus años de secundaria y Universidad y prácticamente toda su vida después de eso.

- no...no puedo hacerlo...me gusta allí...-contestó mientras miraba detrás de su amigo la variedad inmensa de botellas de colores ordenadas cuidadosamente en el estante. Evitaba quizás así encontrarse con los ojos almendrados del barman que lo estudiaban con preocupación.
Jehyun dio una leve palmada en su brazo para que lo mirara.

-está bien amigo...lo que tú decidas está bien siempre y cuando no te haga daño....

-gracias Jehyunnie....-un escozor leve se alojó en su garganta que lo hizo carraspear. Para salir del trance miró el reloj en su muñeca derecha.-oh!!!Si me disculpas debo ir....él me está esperando....-en consecuencia llevó sus ojos a un punto en aquel bar donde se encontraba una mesa de dos algo alejada del resto.

Jehyun asintió con una sonrisa aprobando.

-por supuesto amigo...no lo hagas esperar...-se alejo un paso para tomar dos vasos antes de que el otro se marchara. - lo de siempre?.-ya sabía la respuesta.

-si amigo....Lo de siempre...-y el joven de cabellos grisáceos se alejó de la barra para dirigirse entusiasmado a la mesa que había estado observando. No podía negar que a cada paso que se encontraba más cerca sus nervios aumentaban con la misma intensidad de lo que necesitaba sentir su presencia. 
Había esperado un año por esto.

-hola cariño ..siento haber tardado...el tráfico estuvo bastante congestionado de camino hasta aquí....-saludó disculpándose tímidamente al llegar frente al joven de cabellos castaños que le sonrió tiernamente al encontrar su mirada. Desplazó la silla y tomó asiento frente a él sin dejar de mirarlo.  Desde ese momento nada existía más que ellos dos. -sabes? Estaba tan  ansioso por verte...aunque a decir verdad he esperado que me llamaras antes de hoy.....Tengo tanto que contarte....- Jehyun se acercó en silencio  a la mesa llevando  dos vastos jarrones de cerveza para dejarlos sobre ella. Jaehan le dedicó una sonrisa agradecida  y volvió a concentrarse en quién  lo miraba con tanta ternura y dulzura.
Podría contemplar su sonrisa y la belleza de  sus ojos toda la vida. Porque amaba sus ojos.
Aquellos zafiros azules que desprendían  tanta luz cada vez que los miraba .
Y su nariz tan fina y perfecta que hacían de su rostro digno de haber sido esculpido por dioses.
Y ni que hablar de sus labios rojos color fresas que siempre lucían esbozando una sonrisa de la que él se había enamorado hace muchos años y aún seguía prendido de ella.
Pero ninguna belleza física se comparaba al gran corazón que Sebin  tenía y la pureza de su  ser.
Era su ángel.
Su principio y  fin.
Sebin era su todo y no había nada en el mundo más importante que él.
-las cosas siguen como siempre.... Verás....la rutina en la empresa se ha vuelto aburrida y aunque a veces deseo tirar todo, pienso en ti y sigo adelante....-Sebin asintió sin decir una palabra. -...ahh...dejemos eso...-se pausó un segundo y continuó más entusiasmado.-no te imaginas la buena noticia!!....el mes pasado HanGyeom y JungHoon se comprometieron y te confieso que  hubiera querido ir a esa fiesta contigo. Nos hubiéramos divertido tanto!!!....como en nuestra boda....lo recuerdas? .-el castaño pestañeó suavemente y Jaehan lo tomó como un si. Le sonrió anhelante y enamorado. Sebin movía infinitas emociones  dentro de él aún después de tanto. - de todos modos me sentí bastante  bien ese día  e incluso encontré  a varios amigos nuestros...-una mueca triste se formó en su rostro por una milésima.- ellos  no dudaron en preguntarme por ti.... Les dije que te encontrabas bien....que no había cambiado nada...y  no debían preocuparse por mi...-sin darse cuenta una lágrima se deslizó por su mejilla así que bebió un poco de la bebida y luego aclaró la garganta. -sabes también? Yechan  va a recibirse de profesor de historia y trabaja de bibliotecario en la Universidad.... los JinWoo's decidieron ir a probar suerte a Norteamérica y Hyuk  es profesor de baile moderno y realmente le va muy bien....-recostó unos segundos su espalda sobre la silla sintiéndose más cómodo.-..
me ha invitado a asistir a sus clases pero sabes bien  que el baile no es mi fuerte....sólo a ti te gustaba aquello!!! -Sebin le sonrió más amplio casi como una risa  y su corazón se le aceleró inevitablemente.-prefiero seguir cantando de vez en cuando,  cada vez que nos juntamos con los chicos....y componiendo canciones que hablen de ti....-se hizo una pausa unos cuantos minutos contemplando la mirada pacífica e intensa de su compañero de mesa y bebida. -la semana que viene la empresa realizará  una junta directiva y la presidenta cree que es correcto que esté allí.... Se nota que es tu mamá porque es obstinada igual que tú....-sonrió nostálgico nuevamente y frunció los labios un instante.-yo no quiero ir.... Ese lugar te correspondía  a ti...pero que hacer?.-se alzo de hombros levemente.-No quiero estar de malas con mi suegra...- soltó una leve risa para luego tomar la mano del rubio que lo miraba tiernamente y con una pizca de tristeza y nostalgia. -realmente te extraño....no veo la hora de volver a estar contigo y ser felices juntos como en el pasado....-unas cuantas lágrimas se escaparon de sus ojos y su voz se quebró.
Permaneció atrapando  aquella mano en silencio por unos minutos sin poder hablar esperando que el nudo en su garganta pasara.