Varias horan habían transcurrido desde la fatídica cena de navidad. Severus estaba muy cansado mentalmente, esta no deja de visualizar todas las posibles situaciones que sucederá de aquí en adelante cada una peor que la anterior.
-¿Que harán entonces? Ahora que los Potter saben, no se quedarán de brazos cruzados -pregunto Draco después de un rato. Llevaba aproximadamente 2 horas ahí con una cuarta taza de té. No estaba seguro de la hora pero debía ser muy entrada la madrugada. Agradecía que si amigo siguiera durmiendo, realmente lo necesitaba.
-No lo sé Draco. Esto es bastante complicado. Quería esperar a su mayoría de edad, de esa forma no necesitaría la aprobación de sus padres para un contrato de cortejo -dijo recordando vagamente los planes que ahora eran inservibles.
-¿Entonces porque le diste el anillo ahora? No te recrimino eso, lo que pasó solo fue una mala jugarreta de los acontecimientos -dijo rápidamente al ver que su padrino comenzaba a culparse por lo sucedido nuevamente. Era simple curiosidad.
-Como dije no lo planeaba hacer así, es solo... -no sabía cómo decirlo, en voz alta sonaría más ridículo de lo que ya era para un hombre de su edad.
-¿Ese Cuervo de último año tiene algo que ver? -tanteo Draco disimulando su diversión con la taza.
-Claro que no. Harry no se interesaría por un tipo tan presumido como él -rebatió de inmediato, de solo imaginar una posibilidad así le revolvía el estómago. Suficiente tuvo con verlo revolotear al rededor de su chico-. Sólo quería darle un buen regalo. Amo a Harry, no quiero perderlo porque cree que existe nulo interés de mi parte.
-Y creíste que el anillo compensaría todas las negativas anteriores -concluyó Draco entendiendo a su padrino. En definitiva este no era bueno con las palabras en cuanto al ámbito social se refería pero sus acciones decían más que cualquier cosa-. ¿Entonces?
-No podemos hacer nada ante el ministerio, siendo menor es necesaria la aprobación de los Potter para tener un contrato de cualquier tipo -gruñó frustrado, restregó sus manos por la cara en un intento vano de liberar su mente.
-Y si... ¿lo hacen los goblins?... Después de todo los documentos del ministerio solo tienen peso de control, aún es necesario que los goblins realicen los ritos mágicos de compromiso y cortejo, a ellos poco les importa las leyes del ministerio, realizan lo que la magia aprueba -propuso de pronto. La taza de te que tenía entre las mano pasó a la mesa rápidamente a la mesa en una acción involuntaria de ansiedad.
-Eso sería demasiado, sabes que esos contratos no se pueden cancelar una vez aprobado por la magia, sin importa que estos no requieren ningún permiso de familiares es demasiado -negó furtivamente. En realidad era una gran opción pero implicaba una revelación que temía descubrir.
-Padrino, no es demaciado. Es algo que harán tarde o temprano. Además... Tienen la ventaja de la cláusula de consentimiento -en su opinión una cláusula muy efectiva.
-¿Que es esa cláusula de consentimiento? -pregunto una vos desde el portal del despacho donde Harry se encontraba envuelto con el cobertor de la cama.
-Harry debería estar descansando -habló el hombre poniéndose de pie y acercándose a él para checar su temperatura y escudriñar su cara. Los moretones y rasguños habían desaparecido para su alivio.
-Estoy bien, Sev -dijo regalándole una tierna sonrisa, adoraba que fuera tan atento y Sev amaba su sonrisa-. Ahora, ¿qué es eso de lo que hablaban? -cuestionó a Darco tomando asiento en el sofá de Severus.
-Es una cláusula mágica que impide ser forzado al matrimonio -explicó ignorando los ojos asesinos de su padrino.
-¿Algo como eso existe? Creia que los padres podrían disponer de casar a sus hijos bajo matrimonios arreglados -párpado un par de veces ante la nueva información, no recordaba algo así de las clases de Umbrich, que a pesar de su materia siempre terminaba hablando de cosas legales.
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Del día que nos conocimos hasta hoy... y nuestro futuro.
FanfictionSeverus conoce a Harry cuando este tiene 5 años. Harry es sobreviviente de una guerra que termino por salvar a sus padres, una guerra en la que Severus no participa, pero los Potter creen que si. Con el tiempo ambos desarrollando una amistad inusua...