15-01-1931
Un muy apresurado nacionalista salía de su tierno hogar,con el cabello a medio peinar y los zapatos sin amarrar correctamente.Miró por todos lados antes de cruzar la gran rúa llena de niños uniformados y de alguno que otro vendedor,sus bonitos labios rojos se vieron obligados a abrirse por el susto que le sacó la organización militar,casi se le caen los papeles y el cajón que traía en sus blancas manos.
-¿Por qué tardaste tanto?-,cuestionó duramente el de cabello perfectamente ordenado.
—Tenía unas cosas que hacer anoche,me demore por esa situación.—
-Que no vuelva a ocurrir-,solo recibió un movimiento de cabeza por parte del ojos heterocromáticos.En la oscuridad,el alemán había estado revisando una cantidad excesiva y ridícula de papeles para la mujer que aceptaría,pues necesitaba engendrar a fin de su propio partido y gusto.Está tendría que tener sangre completamente aria y que tenga como mínimo desde 1850.
Lo haría mediante inseminación,no planeaba tocar a una mujer con sus limpias manos,ni tampoco era algo que le excitase.Ambos hombres caminaron hasta el pequeño laboratorio y consultorio, encontrándose con una docena de mujeres carnosas en fila y con solamente una camiseta de tirantes color blanco y un pantalón corto negro.La organización las miró,inspeccionando,sin contar que algunas se sonrosaron,confundiendo con algún tipo de coqueteo.
Aclaró su garganta y fue de nueva cuenta con el país que estaba sentado,este lo miró inocentemente,dejando ver de par en par sus largas pestañas.
Susurró algo en su oído,y Reich le entregó la caja que contenía los espermatozoides.Con asco la agarró,y eligió a la prestigiosa mujer.Falte aclarar que en cuanto se llevó a cabo el procedimiento,la tuvieron en cautiverio para un mejor resultado.Y una vez finalizado este,acabaron con su vida pasada la cuarentena.
(…)
De nuevo estaban ambos hombres,con la diferencia el de mayor altura traía a su pequeño ejército de hijo o así los llamaba.La cuna perfectamente lustrada hacían ver a la niña aún más linda.Reich realmente no sabía cómo reaccionar,nunca había tenido hijos y sinceramente le daba miedo estropear algo,la niña era demasiado frágil para sus blancas y toscas manos delgadas.
Frunció sus carnosos belfos,una mano se posó en su omóplato.Giró su cabeza buscando con la mirada asustada a el alemán mayor,este lo miró entusiasmado,recordando viejos momentos que pasó con su bella flor al tener a su primer descendiente.
Le indicó que la cargase,los miembros del recién padre la sostuvieron con miedo,era tan pequeña y linda,su mirada tenía una gran chispa que hacía sonreír de ternura hasta a el hombre más frívolo.Los cinco infantes de la organización chillaron de emoción en cuanto la vieron,algunos la querían cargar,las femeninas le querían cambiar el atuendo,pues le habían regalado uno.
Pasaron algunos ratos donde la traían de un lado a otro.Poco después se quedaron quietos,por la llegada del antiguo fósil que mandaba en el país germánico,la mirada álgida que poseía el kaiser los hizo quedarse plasmados en fila,entregándole a la niña.Imperio Alemán la cargó,caminó hasta llegar a la recámara de su muchacho.
Lo inspeccionó,parecía que el había dado a luz con todas la ojeras que poseía en su bonita piel,con la ropa más vulgar que le había visto y el cabello tan desordenado, probablemente tenía días sin bañarse,con asco lo mandó directo a el lugar limpio.En lo que Third terminaba de bañarse,el hombre se despidió con una sonrisa cálida a la organización militar y a los menores que le perdieron de un segundo a otro el miedo.
-Oh Dios mío,mírela... Es tan perfecta.
+No puedo creer que sea papá-.Habló entre sollozos ahogados él racista.La cargó,dejándola lo más alto posible.La pequeña criatura le dió una sonrisa,balbuceando,se escucharon los sonidos de emoción del nazi.
-Mein Baby!
+Haré que seas líder del país,nuestra nación sera perfecta,poderosa y maravillosa,¡no como tú miserable abuelo!Un sonido de molestia se escuchó de fondo por parte del fósil alemán,las risitas tiernas del hombre lo hicieron calmarse,se acercó a ver,su hijo estaba más que feliz y emocionado,por un segundo pensó el extraño comportamiento que tuvo cuando se encontraba la SS,pero,simplemente aquel sujeto hacía temblar a cualquiera.
-Me sorprende que estés tan... Feliz,cuando tú naciste-,dió una pausa-.A mí me dió depresión.Ya sabes,nosotros como países es una condena tener un descendiente,¡Es literalmente una sentencia de muerte!-.La menor extendió sus brazos,con dirección a el kaiser,este la tomó y acarició con su rasposo dedo su pequeña mejilla.
Él nazi caminó hasta una pequeña mesa de roble,haciéndo un biberón con la fórmula de leche y agua tibia que tenía en el lugar,trajo consigo una toallita para hacerla eruptar una vez termine el contenido.
-Mirá,no me gustaría llamarla "descendiente" es solamente mi hija,no planeo hacerla un país literalmente,además, tampoco le tengo miedo a la muerte,ya que para aquel lugar voy.
+Pero...Inga,no tiene algún signo de bandera.Ni la marca de nacimiento por si se va a la izquierda o derecha,creo que ella si es una humana por completo,a no ser que no pueda ser un país literalmente.Un golpe se escuchó,haciéndo que Reich se recostase en la cama adolorido,maldito anciano,maldijo en su desesperación.
-Hombre,que va,todavía ni sabe comer y ya estás pensando en que lugar del mundo irá.Hahaha,¡diablos nazi!,piensas mucho las cosas.
Él mencionado imitó sus acciones con un tono de voz chillón,moviendo las manos exageradamente.Al cabo de un rato,el anciano país tenía que irse,talvez vendría en alguna otra fecha o en semanas.Una duda entró a la mente del hombre padeciente de alzheimer.
-Third Reich.
El susodicho lo miró con sus bonitos ojos y juntando los labios en signo de duda,alzó una ceja.
+¿Cuántos años tienes,hijo?-...
+¿Reichi?
-Padre,tengo 16 años.A él hombre casi le daba otro preinfarto,el menor le cerró la puerta en el rostro.
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¡Flor Blanca!
Mystery / ThrillerLa pureza y belleza de Inga eran relucientes,pero,la codicia y los daños de su padre, acabaron con su vida.