Realmente aun te tengo en mi cabeza, rondando en un completo vacío, en si alguna vez te importe, si alguna vez mis esfuerzos los notaste, si aquel amor que demostré realmente lo tomaste en cuenta.
Me dolía el no estar cerca de ti, y todas las noches me atormentaba con la pregunta de que si era suficiente para alguien como tú, al parecer no lo fui tanto.
Acepto que mi obsesión por ti era realmente grande, y que las marcas de los cortes en mi pierna aun permanecen, como un recuerdo opaco de ti y de mi gran mente retorcida en locura.
Permaneces en mi, como si arrastrara un aura de completa oscuridad en mi espalda que me perturba continuamente.
Estas en todas partes