Duelo de mafias - Chaesoo - Jenlisa g!p

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- ¿Cómo vas con el asunto que te encargué? - Preguntó Yang a su sobrina

- Todo va de maravilla, tengo a Jisoo en mis manos, hace lo que yo le diga

- ¿Ya no esta con Rosé?

- Veo que te interesa mucho esa tal Rosé. - Comentó Nayeon

- Ya no me interesa recuperar nada, lo único que quiero es a esa mujer, para eso tengo que quitar a Jisoo del camino

- Para eso estoy yo, creo que han discutido o algo así, tal vez esta sea tu oportunidad para acercarte a Rosé

- Rosé va a ser mía, solamente mía. - Habló seguro Yang Hyun Suk

***

- Hola señor Kim. - Saludó Rosé

- Hola Rosé, pasa por favor

- Vengo a hablar con Jisoo, le dije que ayudaría con su problema

- Muchas gracias Rosé, yo se que Jisoo te hará caso y dejará todo eso, iré a hablarle

El señor Kim subió las escaleras a la habitación de su hija.

- Jisoo abajo esta Rosé, quiere hablar contigo. - Dijo eso abriendo la puerta, observando algo muy desagradable. - No puede ser. - Ahí estaba su hija en la cama junto a otra mujer

Cerró la puerta y bajó nuevamente.

- ¿Puedo subir señor Kim? - Preguntó Rosé

- Jisoo no está aquí

- Afuera esta su camioneta

- No está

- No, usted miente, subiré

- No Rosé. - Iba detrás de ella intentando detenerla, pero fue inútil, había llegado a la habitación, Rosé observó a Jisoo metida en la cama con otra mujer. No quiso hacer un escándalo, pero tenía tantas ganas de reclamar a la mayor por lo que le había hecho. Mejor se dio media vuelta y salió de ahí, con el corazón destrozado al ver que quien decía amarla y decía ser el amor de su vida, estaba en la cama con otra mujer.

Ya mas tarde, Jisoo despertó y se sorprendió al ver a Nayeon a su lado.

- No, mierda. - Se lamentaba. - ¿Qué hice? - Se levantó de la cama y comenzó a buscar su ropa

- Buenos días. - Dijo Nayeon. - Ayer nos la pasamos muy bien

- No, esto no puede estar pasando

- Sí pasó y no sabes cuanto lo disfrute, bueno, lo disfrutamos, porque me encantó la forma en que gemias mi nombre

- ¡Ya cállate!

- No me hables así

- Vete de mi casa, por favor Nayeon, vete

Nayeon hizo caso a las palabras de Jisoo y comenzó a colocar su ropa para minutos después salir de ahí. Justo cuando abrió la puerta de su habitación, ahí estaba su padre.

- Eres mi hija y no sabes cuanto te quiero, pero lo que acabas de hacer fue muy estúpido

- No tengo ganas de discutir contigo

- Rosé vino, entró a tu habitación y te encontró en la cama con esa mujer, esta vez si la perdiste Jisoo

Jisoo terminó de arreglarse y salió de su casa rápidamente rumbo a la casa de Rosé. Necesitaba hablar con ella y explicarle todo. Al llegar tocó la puerta, Rosé abrió pero de inmediato intentó cerrarla.