Como tal es una idea que tenia e iba a hacer para octubre, pero quedada mejor para fechas de noviembre por las festividades del fin de año y cosecha que se solían hacer antes.
Ya me he sentido mejor y me entraron los ánimos de escribir, espero les guste.
PD: Si hare la segunda parte de "Mastodonte tentador" Puede que hasta una tercera, pero de momento quiero pensar bien lo que hare y terminar borradores.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El patriarca Sage mirada un poco inseguro de esto, sabía que tras todo lo que pasada en esta guerra, la señorita Sasha lo que más desearía es poder regalarle un momento casi tranquilo a sus Santo y la gente del pueblo, aunque normalmente los Santos no participaban en las festividades del este, como lo era esa, situada en la época de otoño tras los inmensos esfuerzos de las personas. Un ambiente relajante luego de un año de esfuerzo. Para los aldeanos sea el trabajo, las cosechas y sus rutinas. No era mala idea después de todo, pero no era solo eso, la guerra contra Hades se ha extendido por un par de décadas más de lo previsto a diferencia de otras épocas donde tuvieron este suceso a cuestas, sabía que Athena quería unirse con sus diferentes aliados, preparándose para el peor de los casos.
Suspiro, ignorando sus pensamientos y preocupaciones para adentrarse con Athena, esperaría un rato para bajar al pueblo, donde ya sus dorados deberían estar conviviendo con los aldeanos.
---
- Señor El Cid. - Para sorpresa, y diversión de otros, una de las jóvenes mujeres del pueblo, no menor de los 20, parecía muy interesada en el santo de capricornio.
Ninguno de los dorados traía puesta su armadura, están estaban en el santuario ya que buscaban estar casuales y mezclarse con los aldeanos de forma fácil, pues esto era una celebración que involucraría a todo el pueblo de Rodorio, todos los santo de Athena estaban de acuerdo en hacerlo ameno. Aun así, Cid no era muy sociable, al contrario siempre estada con una cara de pocos amigos, bajo una mirada casi filosa e intimidante. Un hombre bastante estricto. Para la sonrisa de algunos como Manigoldo, o hasta Hasgard, era interesante ver que ella parecía tan interesada en el santo, quedando siempre cerca de su lado cuando se le veía, aun a pesar de que el santo de Capricornio no parecía que le daba mucha importancia.
- parece que tendrá suerte. - Comento el Santo de Leo, mordiendo una manzana, enorme. Que quien sabrá de donde se saco, aunque siendo seguro que de Kardia. - Aunque lástima que Cid es muy serio para eso, podre chica. - Teniendo a su lado a Tauro y Sagitario comento, haciendo sonreír a estos.
- Hablando de Chicas...- Dijo antes de irse, había estada tan ocupado que se había olvidado de su pareja por unas horas. Terminando en lo que estada, ganándose las sonrisas del pueblo agradecido, y yendo a buscarla.
