Ayer me quedé pensando, y si me pagaran por todas las veces que me han dicho 'estás obsesionada con Green Day', tendría tanto dinero como para comprar la propia banda y traerla a mi habitación.
Tal vez tú, querido lector, puedas sentirte identificado con estas palabras...
Todos tenemos un grupo o algún cantante que nos ha sacado de nuestros momentos más inestables, y dejando a un lado los tópicos, nos ha 'salvado'. En mi caso ha sido Green Day, en el tuyo puede haber sido desde el genial grupo de rock, A Day To Remember a la boyband más famosa del mundo, One Direction; no importa quién o quiénes sean, lo importante es lo que causen en ti con su música.No sé exactamente cuando esos tres californianos se volvieron tan indispensables en mi vida. Los escuchaba desde mi niñez, pero no fue hasta llegar a los 13 años cuando se convirtieron en mi principal y única fuente de apoyo.
Aquel curso (que hoy me parece a años luz de distancia) estuvo pasado por malos momentos, malas decisiones, mala compañía y soledad. A mediados de dicho año, estaba envuelta en una nube tóxica que me ahogaba cada vez más y más. Entonces “descubrí” que la música despejaba aquel aire infectado. Cuando quise darme cuenta, me encontraba en una burbuja de voces graves, guitarras distorsionadas y letras que se grababan en la piel; en mi escudo personal.
Me encariñé más de grupos como Blink-182, el cual también fue muy importante en esta fatídica época. O You me at six, All Time Low…
Aunque, claro, Green Day siempre fue la excepción, ellos eran como ese amigo que no te hace sentir bien, en cambio, te comprende. Si estás llorando te dará pañuelos, si estás feliz reirá contigo… (No sé cómo explicarlo mejor).
Puedo recordar entrar por las puertas del instituto escuchando Jesus of suburbia (cogí una gran obsesión por esa canción) y salir seis horas después con la misma canción reproduciéndose. ¿Por qué? Ni remota idea. Supongo que la rabia que desprendía esa canción me hacía sentir bien. Pero no fue sólo Jesus of suburbia, también fue todo el álbum de Kerplunk! , Dookie, Nimrod, Insomniac… (en su amplia mayoría) porque aquellos principios, la distorsión seca y las ganas de comerse el mundo que tenían, me hacía sonreír (por tonto que parezca).
Lo dicho, esos tres locos se convirtieron en mi escudo, y me sentía indefensa y extraña sin ellos un solo día.
Así que, ¿vosotros lo veis como una obsesión? Porque yo no. ¡Pero la gente juzga sin saber! Ellos no tienen ni idea.
Entonces, está bien, yo estoy “obsesionada” con la música, pero ellos lo están con aparentar algo que no son. Y a primera vista, mi obsesión es mucho más sana que la suya.
multimedia: ¿Se puede ser más genial? me voy a suscribir al canal de este tio, en serio.-M
ESTÁS LEYENDO
El Año De Los Fugitivos
SaggisticaSólo el día a día de una chica normal en el peor año de su vida. ¿Conseguirá escapar de sí misma? Copyright © 2014, 2015. Todos los derechos reservados.