Cuando nos conocimos

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Tres años atrás

                                                                Lily 

Era el primer sábado del nuevo curso escolar, tenía que ir al club de canto, eso me gustaba ahí podía ver a mis amigos del coro, no a todos, pero si a la mayoría.

Y eso llenaba un poco mi alma rota, ya que gracias al colegio que mis padres eligieron para mí, al cual tenía que asistir de ahora en adelante, todo en mi vida se iba en picada, todo se tornó de estar bien a sentirme en el infierno.

La escuela preparatoria, era un asco completo para mí, detestaba estar ahí, lo único bueno eran el club los sábados.

Pero seguía negándome a que lo había perdido todo, ya que antes todo para mí era casi perfecto, al fin había encontrado un lugar al que pertenecía, me sentía bien conmigo misma, sentía que tenía un hogar, personas a las que les importaba, que me escuchaban y se preocupaban por mí.

Tenía unos amigos maravillosos, iba a las clases de música después del colegio al cual sí que me gustaba ir, tenía las mejores notas y casi no estaba en mi casa.

Adoraba mi vida, tan solo unos meses atrás todo era increíble, yo lo tenía todo, pero sobre todo lo y más importante era que las atroces voces de mi cabeza casi no se escuchaban.

Parecía que no hablaban, incluso que no existían.

Todo era un mundo lleno de color. Hasta que todo comenzó con la partida de Julie Evans, mi mejor amiga, ese día sentí que perdí a mi otra mitad.

Julie y yo nos conocíamos desde que teníamos siete años, habíamos sido mejores amigas desde entonces, los mejores y peores momentos los habíamos pasado siempre juntas, así había sido hasta que nos graduamos de la escuela secundaria.

Esa noche nos habíamos divertido como nunca antes en la vida, Julie se puso tan ebria y yo solo podía reírme, esa noche me quede en su casa, ambas queríamos que eso durara para siempre, que el tiempo se quedara ahí congelado, que nos faltaba más tiempo para seguir la una al lado de la otra, pero eso no fue así.

Al día siguiente fue el concierto de fin de curso, todos fuimos vestidos con vestidos hermosos y trajes. El concierto fluyo como cualquier otro, yo quería que no se acabara, ya que sabía lo que ocurría después de que este terminara, Julie tenía que partir y yo la perdería.

Solo puede abrazarla, me quede cayada, no dije nada porque sentía que si pronunciaba tan solo una palabra sería más difícil decirnos adiós, y ninguna de las dos quería que esto pasara, yo no quiera que ella se alejara de mi vida, no quería que se fuera.

Pero el tiempo no se puede quedar, donde todo nos parece maravilloso, el tiempo corre y cuando menos te lo esperas te arrebata de las manos lo que más quieres.

Ella ni adiós me dijo, solo vi como ella se alegaba corriendo y subía al auto de su madre.

Yo me quede ahí completamente destrozada y sola. Sabía que no nos veríamos en mucho tiempo.

Desde ese día sentía un vacío, como si algo me faltara, como si me hubieran robado un pedazo de mi ser.

El verano paso, al igual que las noches en las que lloraba su partida. Comencé la preparatoria y todo empeoro, ya no podría asistir a las clases de música, gracias a que mis clases ahora eran en el mismo horario que las otras. Con esto perdería todos mis amigos de ahí, perdería mi hogar.

Ya solo podía verlos los sábados, y eso no era suficiente, pero era algo.

-Ya estas lista Lily-grito mi madre desde la parte de debajo de la casa.

Quiero tenerte en mi vida ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora