𝑬𝑺𝑷𝑶𝑺𝑨𝑫𝑶𝑺 -- 𝐓𝐚𝐞𝐤𝐨𝐨𝐤 ✓✓

04

“El odio es el disfraz del amor no correspondido. Por eso te odio tanto, porque no podré amar a nadie más como te odio a ti.”

- Leunam.

— ¡No funciona! — exclamó el menor sintiendo que poco a poco perdía el aire.
Habían pasado los minutos y no podía zafarse, ni los ganchos le ayudaban. — Están en problemas, ambos.— les advirtió a sus dos mejores amigos señalandolos con mucho enojo.
Más que eso, Jungkook se sentía inferior estando ahí, atrapado o quizá descubierto.
No podía ni siquiera describir lo que en ese momento su corazón trataba de decirle.

Latía fuerte de miedo, nervios y un poco de ternura.

— No hagas fuerzas, me lastimas.— se quejó Tae un poco molesto por como Jungkook se lastimaba a sí mismo con tal de lograr algo. — Pronto tu muñeca enrojecera, detente. — le pidió tomando con suavidad la mano de Jungkook y la junto con la suya teniendo contacto.

Jungkook era un tomate, literalmente más rojo que aquella verdura.
Empezó a temblar y quiso llorar ahí mismo, quería desaparecer de la tierra y nunca más volver a ser visto.

— ¡Cállate! Seguramente tú planteaste todo esto. — acusó mientras trataba de tragarse sus lágrimas. — ¿Libro de matemáticas? ¡Qué gran mentira!

— ¡Bueno Ya!— hablo Yoongi exhausto por los gritos.

— Tú también cállate, Yoongi.— volvió a hablar Jeon un poco más relajado pero con la mirada quemándole. — ¡Tú tampoco hiciste nada, los tres son culpables y más les vale quitarme esto si no quieren problemas!

— ¿Me estás amenazando?—

— Tómalo como quieras, Yoongi.—

— ¡Chicos, basta! Fui yo el único que tuvo la idea.— explico Hoseok arrepentido. — Si te vas a enojar con alguien, hazlo conmigo y solo conmigo. — no supo en que momento se arrepintió tanto, con el carácter explosivo que tenía su amigo debió suponer que algo así sucedería. — Yoongi y Tae solo son víctimas de mis estupideces...

Y al escuchar eso el corazón de Jungkook se rompió, había perdido el control totalmente y la culpabilidad emanó. — Yo...— intento decir, pero nada salía de su boca.

— Lamento que esto sucediera.— se disculpo Tae al ver a los tres chicos frente a el con el rostro bajo. De las pocas veces que les vio hablar está era la primera que noto la tensión en el aire.

Ellos nunca peleaban.

— Buscaré las llaves en mi casa.— comento Hoseok sacando su celular y marcando un número, luego de unos segundos pareció ser respondido. — Hola... Si, necesito que veas en el bolso de papá... Si, ese... Unas pequeñas llaves, seguramente están ahí.— hubo silencio y todos estaban atentos a los gestos de Jung. — ¿Cómo? Tome unas esposas, ahí también deben estar las llaves... ¿¡Que!?—

— ¿Qué pasa?— susurro el más pálido de los cuatro. Hoseok colgó la llamada un poco nervioso.

— Llamaré a papá, si... Esa es la solución.— sonrió fingiendo estar tranquilo, cosa que no funcionó y solo puso a Jeon más molesto. El celular nunca fue atendido. — Bueno, tenemos dos noticias. ¿Quieren escuchar la buena o la mala?

— La mala. Habla.— ordenó Jungkook mientras se colocaba frente a el llevadose a Tae. — Habla..

— Bien, la mala es que en el bolso de papá no habían llaves...— los ojos del menor se abrieron en preocupación. Esto no podía ser real.

— ¿Y la buena?— interrumpió Tae llamando la atención de todos ahí. — ¿Qué? Deben haber buenas noticias....

— Si. — contesto el pelirrojo. — La buena es que papá si sabe dónde están, solo debe desocuparse.—

— ¿A qué hora será?— indagó Min. — Yo sabía que tú papá salía de viaje.— comento haciendo que los esposados gritaran juntos un "¡¿Qué?!" Acompañado de más nervios.

— ¿Cómo iré a casa? Hoseok, ¡busca una solución!

— ¡No me grites! Ok, estoy pensando en algo...— trago duro y se recostó en la pared para luego deslizarse al suelo. — Jungkook, irás a mi casa a dormir... Tae... tú también.—

— Yo no iré con el. —

— ¿Sabes, Jungkook? ¡Tampoco quiero ir contigo!— le gritó molesto, Kim Taehyung había llegado a su límite.