Los infieles | MiTake-fem - [Corrigiendo]

Capítulo 8 | Dulce visita

📌 Nota de la autora

Apartir de este capítulo y los siguientes, aún no están corregidos. Pero lo iré haciendo poco a poco.

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Al día siguiente, en la pastelería donde trabaja Takemichi, ella mantenía su barbilla recargada en su mano, mientras se encontraba pensativa, por lo que sucedió entre ella y Mikey.

— "No voy a negar que disfrute mucho el estár con Mikey-kun." — se decía mentalmente — "Pero... ¿Qué pasará si Naoto-kun, o la esposa de Mikey-kun, se enteran que los estamos engañando?. Esto traerá demasiados problemas para ambos." — se notaba inquieta — "Nunca me imaginé llegar a estos extremos. Pero, no pude evitarlo. Realmente amo mucho a Mikey-kun."

Takemichi seguía en sus pensamientos. Hasta que escuchó que alguien intentaba llamar su atención.

— Ah, Take-chan. — habló una voz femenina

La ojiazul es sacada rápido de sus pensamientos y ve que enfrente de ella se encontraba Senju, solo observándola con el ceño fruncido.

— ¿Qué pasa? — preguntó confundida la azabache — "Pero, ¿Cuando tiempo lleva aquí?" — se cuestionó

— ¿Acaso no has escuchado nada de lo que te he dicho? — preguntó Senju, haciendo un pequeño puchero — Sabes... llevo tiempo estando aquí. — indicó en queja

— L-Lo siento mucho. — se disculpó la ojiazul, mientras sus mejillas se sonrojaban de la vergüenza

— ¿En qué tanto piensas para no prestarme atención?. Tienes tu mente totalmente pérdida. — observó la pelirubia

Takemichi solo veía a Senju. Y nuevamente en su mente le llegará la imagen de Mikey desnudó. Eso hizo que se sonrojara.

— ¡Oye!. —  gritó Senju, para sacar a la ojiazul de ese pensamiento lujurioso

— ¿Qué? — reaccionó

— No se donde tengas tu mente, pero puedes dejarlos aún lado por un momento. — pidió la pelirrubia algo irritada — Quiero que me escuches.

— Ah, por supuesto. ¿De qué se trata?

— Es sobre un hombre que me llama mucho la atención. — dijo Senju — Bueno... es unos años mayor que yo, pero sin compromiso.

— ¿Y qué quieres que te diga? — cuestionó confusa

— Me gusta mucho ese hombre. — declaró — Pero no se cómo acercarme a él. Tiene una mirada fría, que si me acerco a él siento que me mandará al carajo.

— ¿Y yo lo conozco?

— B-Bueno... ¿No sé si lo recuerdes?, pero es el administrador de una empresa de motos, la más famosa de Tokio. — explicó un poco sonrojada la pelirrubia

— ¿Hablas de Wakasa Imaushi? — preguntó sorprendida la ojiazul

— Así es. No está casado, mucho menos comprometido. Quisiera poder acercarme más a él y tal vez primero ser amigos y ya veremos qué pasa después. — expresó la mujer

— Puede que sea un hombre de mirada fría, pero he escuchado que es una buena persona. — mencionó Takemichi, para después sonreír — Así que no debe darte pena, acercarte a él. Además, dudo que te mandé al carajo

— Puede ser. Pero, ¿Cómo puedo acercarme a él?

— Eso no se. Pero sé que lograrás conocer más a Imaushi-sama, y así tener más acercamiento. — animó a su amiga — Además, no entiendo porque te preocupas tanto, eres bella y aún joven, se que si te acercas a él, quedará perdidamente hechizado por tu belleza. Así que arriba esos ánimos.