•6•

28 3 6
                                    

Caramelo
Jessie cada que te veo estás más linda, me alegro de poder bailar contigo aún si es solo un baile de amigas, pero ninguna historia marina tiene final feliz sin haber pasado por un monstruo, y el nuestro llegó a la fiesta en ese momento.
Sus manos rodearon tú cintura por sorpresa, pero porsupuesto tú estabas encantada con esa sorpresa.
Leon, no sabía que si vendrías—

Y la bestia lanzo su primer ataque al barco,
—Bueno, quería ver a mi novia y un pajarillo me dijo que estarías aquí—
Y por supuesto el tierno beso en la mejilla, de nuevo era la tercera rueda pero está vez pude ampliar mis horizontes, mis ojos no eran los únicos heridos pues tras Leon un joven con ojeras veía a mi ángel como si fuera un demonio.

Oh Leon ya prometí que me quedaría con Penny, es una salida de amigas, además no me gustaría que Sandy se quedará solo—
Estaba tan tentada a apoyar esa frase con todas mis fuerzas, pero si quería ser la capitana de esta nave, necesitaba hacer mi estrategia y aliarme con los que buscan lo mismo que yo,
Esta bien Jess, yo puedo acompañar a Sandy un rato mientras pasas tiempo con el ñoño—
Y ahora habían tres miradas sobre mi, las confusión de Sandy, la alegría de un ángel y la ira de un monstruo marino.

Por supuesto que note la mirada de Sandy, la conocía a la perfección pues esa es mi mirada cada que veo a ese Leon, pero debía aproximarme con cautela, pues aunque nuestra lucha es la misma no significa que seamos aliados.
—Porqué quieres estar conmigo?—
La somnolienta voz de este chico lo hace sonar más curioso, y eso es lo que necesitaba, tan solo su curiosidad.

—Siento que te pusiste tenso con la parejita—
Ese infantil tono de asco me salía perfecto, pero Sandy no se atrevió a decir nada,
—He visto esos ojos antes, como piratas la vida es dejar el amor en el muelle y solo mirar a la distancia—
Probablemente una frase exagerada pero solo estoy descifrando a este chico, su largo suspiro me dió una entrada para adivinar lo que pensaba.

Una palmada en el hombro siempre ayuda a saber que están ahí para ti, así que procedí,
—He estado ahí compañero, si quieres hablarlo puedes contar conmigo, después de todo no soy nadie para juzgar—
Y vaya que Sandy fue una bomba de sentimientos pues de inmediato me dió el abrazo más flojo que he sentido,
—Gracias Penny, eres buena para ser un pirata—
Si si, soy un rayo de sol, esperanza, lo que sea, ahora sería un ganar ganar, conozco bien lo que Sandy siente y quiero ayudar como quisiera que me ayudarán a mi.

Las lágrimas saladas del chico eran el mar en el que se ahogaba y cada palabra que decía era una patada que daba para tomar aire, finalmente la parte más esperada llegó,
—Penny, estoy tan tontamente enamorado de él, pero si importar lo que haga el jamás me verá como la ve a ella—
Su amarga voz era como una espina en el corazón, solo necesitaba algo de esperanza,
—Se como te sientes, estamos en el mismo barco mi amigo, así que quiero ayudarte a conquistar ese problema—
Y con esas palabras el brillo de sus ojos se encendió.

Entre nuestra amena conversación el tema era el mismo, frases de porque no eran buena pareja, solo están acostumbrados el uno al otro, quizá solo se ven como un trofeo y ya, todo lo que necesitan es ese pequeño empujón que los llevará a descubrir nuevas y hermosas experiencias, nunca fuí la más positiva pero si sabía algo era que yo siempre llegaba al tesoro sin importar los obstáculos del camino y si de paso ayudo a un pobre corazón, bueno, eso ya es un extra para mí.

La noche avanzó trayendo de regreso a mi angel acompañada del inconveniente, él claramente no quería despedirse aún, más sabiendo que ella estaría a mi lado, pero un novio jamás se interpondrá entre dos amigas tan unidas y con una mueca de disgusto se obligó a partir camino junto a mi nuevo amigo Sandy.

♡Jessie♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora