Mausoleo De Amor (LUMITY)

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No sé ni siquiera como empezar, pasaron tantas cosas que mi cerebro da más vueltas que una atracción de feria.

El día que me aferré al amor como una flama en plena lluvia torrencial, el día que pensé que después de tantos fatídicos momentos iba a lograr mantenerme a flote como una botella en el mar esperando a ser encontrada, ese maldito día...

Es extraño poder tocar un tema tan sensible para mí aquí, en esta hoja de papel amarillenta y bastante maltratada por culpa del  tiempo, pero al mismo tiempo siento que es mi única ruta de escape, la única manera de curar la recurrente apnea que sufría todas las noches a causa de la melancolía, la nostalgia y el arrepentimiento.

Rebobinemos un poco en el tiempo, volvamos al principio de mi fin...

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Me llamo Luz Noceda, tengo 19 años, mido 1.70, soy fanática de la brujería y las cosas paranormales, adoro leer libros de fantasía y de acción...  —detuve el movimiento de mis dedos sobre el teclado con frustración, tengo casi 20 años y no puedo hacer algo tan sencillo como una autobiografía que llegue a ser medio decente

Me separé de mi escritorio con las manos sobre mis ojos, frotandolos con algo de fuerza mientras pensaba en una mejor manera de redactar la información pero nada me venía a la mente, mi cabeza era como un cascarón vacío

Se trata de mi misma, escribir al menos tres cuartillas sobre mi vida ¿por qué carajos es tan difícil?

—¡Luz!—el grito de mi madre logró aligerar un poco mi situación actual, retiré las manos de los ojos y miré fijamente el monitor de mi computadora, aún que veía las letras un poco distorsionadas por la presión que ejercí sobre mis párpados

—¡Dime ma!— me levanté de la silla para poder estirar mis piernas que llevaban horas encogidas mientras que recibía una respuesta de mi madre

—Baja ya, al parecer tu padre no llegará a cenar hoy tampoco— sonaba desanimada, cómo siempre se pone cuando papá le dice que no llegará otra vez a casa

'Enseguida' le contesté mentalmente, la verdad es que el tema comenzó a darme igual hace un tiempo, no puedo entender a un padre que se ausenta tanto con sus hijos y después aparece un día en tu puerta con un montón de cosas para regalarte, cómo si el dinero comprara el tiempo, cómo si portar ropa de diseñador y los celulares más modernos del mercado compraran mi amor...

Bajé las escaleras en segundos borrando los pensamientos que a mí padre se refieren y reemplazandolos por intentos de adivinar que era lo que mamá había cocinado está noche, guiandome por el olor pude saber sin dificultad de que se trataba

—¿Lasagna? Hacia mucho que no la hacías—intenté ser amable con ella, así que le ayude a preparar la mesa colocando la vajilla y los cubiertos, en segundos estaba completamente lista una mesa para dos

—Hace tanto que deje de cocinar lo que me gusta, pensé que hoy sería una noche especial— por la expresión en su rostro supe que de nuevo la imagen de mi padre se estaba adueñando de su cabeza, sus ojos comenzaron a empañarse poco a poco pero de inmediato los limpió para evitar que me diera cuenta, sin embargo la ví y mi corazón se rompió un poco

No puedo entender del todo como es que se siente en estos momentos, quiero decir, siempre he sido una persona que vive a la sombra del mundo, para algunas personas ermitaña, para otras introvertida, es por esa razón que jamás he tenido una experiencia cercana al amor de pareja

—No te preocupes ma, hay que pasarla bien, ya tendremos tiempo de estar todos juntos— le hablé con una esperanza falsa, esperando  que mis palabras pudieran endulzar un poco sus ilusiones