CAPITULO QUINCE

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25 de junio
Jack Scott






Mi hermosa April estaba parada frente a mi tratando de no mirarme su rostro estaba magullado cosa que logue notar en el auto, sus ojos ya no tenían el mismo brillo que antes, sus ojos ya no me proyectaron nada solo estaban ahí como un adorno más a su rostro, sus mejillas tenían algunos raspones y hematomas, estaba tan nerviosa que temblaba, pero la conocía lo suficiente como para saber lo que estaba pensando.

-eso que estás pensando me lo borras-

April río por lo bajo.

-lees la mente? - articulo levantando la vista-

-no hace falta, desde que comenzó a hacerte todo esto, estas chucuchun, chucuchun, chucuchun- gire mis dedos en el sentido del reloj haciendo círculos en el aire- con la lavadora de la culpa, ya está he-

-estaba todo excelente Jack, ambos siendo felices juntos, hasta que decidí enamorarme y permitirle hacerme todo esto – termino de hablar y se señaló completa- todo porque no supe seguir indicaciones y no salir ni hacer nada- hizo una pausa y suspiro- es muy normal que me ponga con la lavadora no crees? –

- escúchame April, y te lo vas a grabar aquí adentro detrás de esa frente tan bonita que tienes- me acerque a ella y pose mi mano sobre una de sus mejillas- tu eres una mujer libre, eres libre de irte de fiesta, eres libre de irte de su lado y eres libre de irte del planeta si tú quieres- bajo la mirada una vez más y se dedicó a esquivar mi mirada- April ….. –

-Jacky- contesto y se abalanzo contra mi envolviendo sus brazos en mi cuello, sonreí y solté una pequeña carcajada al escucharla llamarme Jacky- que? – pregunto- que es lo que te causa gracia Jacky-

-haci me llamo Max la noche que me dijo que me alejara de ti-

-oh-

-tranquila, me gusta cuando tú lo dices- sonreí poniendo mi cabeza en su hombro lo que era un poco difícil ya que yo era más alto que ella-

- tengo hambre- hablo ella-

- ¡eso quería escuchar! -

Ambos bajamos a la cocina y como ninguno sabia cocinar estuvimos mirando a toda la cocina sin saber que hacer por mucho tiempo

-pedimos comida- pregunte-

-no será necesario – la vos de June salió desde detrás de nosotros, giro hacia April y como si mi vida dependiera de ello la abrace escondiendo su rostro en mi pecho-

-Jack- se quejó April- no puedo respirar-
-silencio – ordene murmurando-

-tranquilos ya se lo de Max – explico June dejando su bolso sobre la mesa-

-será mejor que la leve arriba a descansar- hable- podrías llamarme para ayudarte a subir la cena? –

-lo llevare yo sola, está bien llévala arriba y toma la bolsa de hielo de la nevera para que se lo ponga en la cara- asentí y saque la bolsa del refrigerador para luego llevarla a su habitación-

*******

-sabes desde hace mucho no tomaba pastillas- hablo haciendo que la mire y deje de arroparla-

-es lo mejor- conteste-

-y desde hace mucho que nadie me arropa- sonrió- sabes que puedo hacer las cosas sola verdad? –

-si, pero quiero cuidarte-

-bien- aparto sus cobijas y se sentó sobre las sabanas-

-tienes hambre verdad? – pregunte-

-si- tome el plato de sopa y lleve la cuchara llena de caldo hasta sus labios- sabe bien –

-uhm, uhm- musite asintiendo mientras seguía llevando cucharadas de sopa hasta sus labios hasta que ya no quedo nada en el plato-

-que buena niña terminaste todo- aplaudí con las yemas de mis dedos- ahora debes tomar tus pastillas- se las ofrecí- vamos no seas niña solo son pastillas- la remede haciendo que ella recuerde lo que me dijo hace algunos meses –

- si ya se- recogió todas las pastillas y en una bocanada se las metió todas a la boca-

-necesitas agua? – pregunté a lo que ella asintió- toma- dije mientras le alcanzaba el vaso de agua-

- listo debo dormir- se recostó de nuevo y se cubrió hasta la cabeza con sus cobijas-

-bien, ya debo irme- suspire y tome los platos para llevármelos y dejarlos en la cocina-

-Jacky? –

-no voy a quedarme April-

- es que necesito calor humano- repitió mis palabras-

- cómo es que recuerdas todo lo que digo? -pregunte-

-tengo las neuronas bien conectadas- explico tocándose las cienes con el dedo índice-

Sonreí y me acerque a ella hasta recostarme a su lado-tus padres van a matarme- articule mientras ella envolvía sus brazos alrededor de mi cintura y contesto un “no me importa”.

Todo choco conmigo en el momento en que se acercó a mí, su calor, su olor, sus latidos, su respiración, todo, aunque creo que fue el no haberla visto ni tocado por mucho tiempo lo que hizo que me pusiera tan nervioso que ni siquiera quería respirar para no moverla y que durmiera plácidamente, pero su voz me hizo reaccionar y también me dejo un poco sorprendido.

-Jacky-soltó un suspiro y sonrió- te amo …..

Me congele. No logre respirar hasta que mis pulmones no pudieron aguantar más sin aire y tome una bocanada.

-que dijiste? - pregunte moviendo un poco su cabeza, pero ella no respondió y solo sonrió escondiendo más su cabeza en mi pecho- April? -pregunte una vez más- Angelito repite lo que dijiste por favor? – pedí- Angelito vamos no me tortures haci, por favor repite lo que dijiste-

-los somníferos hacen efecto-murmuro-

-ni se te ocurra dormirte hasta que vuelvas a decirme lo que dijiste-

-tengo-hizo una pausa- mucho- pauso una vez más- sueño-

-vamos Angelito dímelo otra vez- me moví bruscamente e hice que me viera a los ojos-

-Angelito-repitió mis palabras y sonrió mirándome con un poco de dificultad ya que sus parpados parecían pesarle- me gusta cómo suena eso-

Sonreí ante su comentario-y a mí me gusta tu sonrisa- respondí-

-uhm, uhm- musito-

-por favor no cierres los ojos-pedí –

-el somnífero- suspiro y otra vez cayó sobre mi acurrucándose en mi pecho como un gatito-

-descansa –

Y después de mucho tiempo recordándola en las blancas y pálidas paredes de mi habitación del hospital, estaba ahí a mi lado abrazándome, ella estaba a mi lado otra vez y era todo lo que necesitaba.

Éramos la combinación perfecta, yo era ruidoso sonriente siempre centrado en hacer amigos, aunque deba callarme algunas cosas para serlo, además de ser algo torpe, y ella jamás se callaba nada que le desagradase, no tenía como meta tener un millón de amigos, ella solo quería uno, uno verdadero, ella se decía a ella misma

“soy como una bomba atómica siempre llego para destruirlo todo con mis palabras”.

Ambos éramos dos grandes desastres ocasionando un caos perfecto.

Ocean Eyes 💙💫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora