Los oídos me retumban, los pies dolían al grado que dar un mísero paso era un dolor insoportable. Mi cabeza dolía más que nada, estaba cansada tanto físicamente como emocionalmente.
—¡Vamos! Vamos tenemos que salir a dar esa presentación! -decía uno de los del staff. Yo simplemente cerré mis ojos y me dejé caer al sofa que estaba tras de mí.
—Solo una presentación más, ________. -abro mis ojos y me encuentro con el rostro de Scarlett.
—Estoy muy cansada, Scar. No he comido absolutamente nada desde ayer, no me queda energía -mis ojos se fueron hasta encontrarse con los de Evans, él me miraba de una manera reprobatoria, pero en su cara había algo más. Se veía agotado. Como todos los demás.
—¿Qué? Estás loca. Ven, vamos a buscarte algo para que comas, _________.
—¡No hay tiempo para comer. ¡Arriba vamos!
Con pesadez me levanto de mi lugar. Los chicos se levantan al igual que yo, comenzamos a caminar por un largo pasillo. Mi cabeza comienza a dar pequeños golpes, es necesario detenerme y recargarme contra una pared. Me siento mareada.
—¿Estás bien? -escucho la voz de Hemsworth. Me limito a asentir con mi cabeza.
—Estoy bien... solo estoy algo mareada es todo. -sigo hablando, pero todavía no soy capaz de abrir mis ojos.
Estoy por seguir con mi camino, pero los gritos de unas chicas hacen que mi cabeza esté por explotar. No es hasta que escucho que gritan el nombre de mi novio que abro los ojos de par en par. Evans está en el suelo, con sus bellos ojos cerrados, mi corazón palpita de manera frenética, y no me doy cuenta de que corrí en su dirección hasta que Lizzie me detiene a centímetros de Chris.
—¡Espera, _________, solo espera! -trata de tranquilizarme, pero es algo imposible.
—¡Chris, cariño! -las lágrimas no tardan en aparecer en mis ojos.
De un movimiento brusco me suelto del agarre de Olsen, y me inclino hasta tocar con mis manos la cabeza del amor de mi vida. Su piel está pálida y fría.
En un momento alguien me levanta con brusquedad y me empuja. Siento un intenso dolor en la parte de atrás de mi cabeza. Mi vista se comienza a poner borrosa, todo me da vueltas. Hasta que a lo lejos escucho la voz asustada de Jeremy pidiendo que los paramédicos llegaran pronto. No siento mis piernas y de la nada es como si estuviera en el limbo.
Mark me dice algo que no soy capaz de entender. Al final todo se vuelve negro, los sonidos dejan de existir y todo deja de doler. Mi último pensamiento antes de caer en el vacío es una persona. Chris Evans.
Al abrir mis ojos, siento un fuerte aroma de alcohol entrar por mis fosas nasales. Un dolor algo intenso en mi cabeza. Mis ojos están pesados, y cuando logro abrirlos completamente todo lo que veo son motas de diferentes colores y figuras distorsionadas, hay alguien frente a mí, pero no logro diferenciar quien es, mueve sus labios, está hablando, pero todo lo que escuchan mis oídos es un intenso y constante pitido.Hasta que cierro los ojos con mayor fuerza y al abrirlos ese pitido que me estaba impidiendo ver y oír bien se va completamente.
Frente a mí está ese chico con un pequeño lunar en su mejilla, sus ojos muestran señales de preocupación pero no pierden su intenso brillo. Del cual me enamoré profundamente.
—¿Amor? -escucho finalmente sus palabras.
—Chris -digo en un susurro. Pero de la nada todo vuelve a mí. Él está tirado en el suelo, frío y pálido-. ¡Cariño! -mi tono de voz es más alto esta vez-. Dios, ¿qué fue lo que te pasó? -mis manos se van hasta su cara. Inspeccionando su rostro en busca de algún hematoma.
—Solo fue un desmayo, preciosa. Nada de lo que debas preocuparte. -me da un tierno beso en mis labios, eso me calma de cierta manera, sentir sus labios contra los míos siempre me ha dado calma.
—¿Nada de lo que deba preocuparme? Mi amor, ¿acaso escuchaste lo que dijiste? Me estás diciendo que te desmayaste, obviamente me voy a preocupar. -él me sonríe y da otro pequeño beso a mis labios.
—Escucha, todos estábamos demasiado cansados. Sin comer, sin dormir bien, estábamos exhaustos. Mi cuerpo no pudo más y colapsó. Me despierto y lo primero que veo es a ti inconsciente también. Me asustaste, amor. -menciona aquellas últimas palabras mientras que con su mano derecha acaricia delicadamente mi mejilla.
—¿Qué me pasó?
—Bueno -se rasca la nuca-. En realidad lo que escuché fue que alguien te empujó con más fuerza de la necesaria, golpeaste tu cabeza. Y como tenías casi dos días sin comer absolutamente nada, tuviste una recaída. Y el golpe en tu preciosa cabecita solo aceleró el proceso, mi amor.
Suelto un suspiro y veo a mi alrededor. Los chicos estaban muy atentos mirándonos. Unos sonríen, otros dan saltitos de alegría, y uno que otro aplauden de manera lenta mientras intentan reprimir unas sonrisas. ¿Qué les sucede?
Me doy un golpe mental, nuestra relación era secreta, ni los chicos tenían conocimiento de nuestros sentimientos el uno por el otro, siento como mis mejillas se tornan de un rojo carmesí. Evans lo nota, se levanta y me tiende la mano para que pueda levantarme de igual manera. Cuando me reincorporé totalmente, él pasó su brazo por mi cintura atrayendo mi cuerpo al suyo.
—Chicos -dice él-. Les presento a mi novia y el amor de mi vida __________ ____(T/A)_____, llevamos tres meses de noviazgo.
(T/A, tu apellido)
Los chicos nos miran con incredulidad, pero al final sueltan las risas, los aplausos y un sin fin de bromas nos comienzan a atacar.
—¿Por qué nunca nos dijeron nada? -un entusiasmado Holland dice al tiempo en que se sienta en el piso. Los demás hacen lo mismo y se forma un círculo.
—Bueno -empiezo yo-. La verdad es que yo le pedí a Chris que lo mantuvieramos así, ya que sería de alguna manera más fácil de sobrellevarlo y así también nos daríamos cuenta de si en realidad funcionaba lo nuestro. -él entrelaza su mano con la mía, la sube hasta sus labios y deja un beso en ella.
—Pero ya van para cuatro meses, ¿no se les ocurrió que era hora de decirnos? -Elizabeth es quien pregunta ahora.
—En realidad si pensábamos que ya era momento de contarles, ¿verdad, cariño? -yo solo atino a asentir con la cabeza-. Pensábamos que sería una buena idea decirles en nuestro cuarto aniversario.
—Me siento ofendido holland hace un puchero.
—No, no, nada de pucheros -digo al tiempo en que me levanto de mi lugar y voy a abrazar a Hiddleston.
—Mamá __________ al rescate -Scarlett comienza a reír, al igual que todos nosotros.
—Ahora tenemos a un papá que es Anthony -lo señala Hemsworth. Y una mamá que es ___________.
—¡Hey! El único que puede formar una familia con mi bebita soy yo. -Chris hace un puchero. A lo cual yo carcajeo.
Horas después, cuando todos duermen en sus habitaciones, alguien toca a mi puerta. Me levanto y veo a mi novio. Me hago a un lado para que pueda pasar. Lo hace. Nos vamos a la cama y nos acostamos, nos acurrucamos en cuestión de segundos. Yo lo abrazo y él da masajes en mi cabeza.
—Crees que ahora que los chicos saben sobre nosotros, ¿algo cambiará? -levanto mi mirada hasta toparme con sus preciosos ojos. Deja un beso en mis labios.
—Ahora todo será aún más perfecto, mi amor. Aquí estoy y estaré para ti siempre.
—Te amo, Chris -le doy un beso más.
—Te amo más, mi preciosa novia.
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One Shots. (Steve Rogers/ Chris Evans)
FanfictionHistorias cortas de nuestro soldado y actor favorito.