Amor Bravio

Epilogo

10 años después

Ya habían pasado 10 años desde que Victoriano e Ines se dieron el sí delante de Dios, 10 años donde la paz y el amor reinaba en su familia y en su hogar. Como todos los días Ines se levantó temprano, salió de la cama despacito para no despertar a su marido, fue directo al cuarto de sus hijos y despertó a ambos.

Estos bajo protesta y aún adormilados se levantaron para entrar a su respectivo baño y asearse. Ines regresó a su habitación, sacó la ropa de Victoriano y se la acomodó en el baño para cuando este despertara. Bajó corriendo a la cocina, puso a hacer café para luego darle indicaciones a las muchachas para el desayuno. Una vez quedó todo listo subió a su cuarto, allí se dedicó a despertar a su esposo a besos, amaba esa parte de sus mañanas.

Buenos dias dormilon,- le dijo con una sonrisa

Hola mi morenita,- le dio un dulce beso

Dale ya levantate, ya te deje tu ropa en el baño

¿Me acompañas al baño?

No porque nos tardaremos mucho

Anda morenita, prometo que no nos demoramos

Esta bien, pero si llegas tarde no me eches la culpa

No lo hare, vamos

Se amaron bajo el agua olvidándose de que no estaban solos en la casa, y después de un rato de jabón y regaños por fin bajaron a desayunar. Cuando llegaron a la mesa, sus hijos estaban comiendo, se sentaron con ellos para disfrutar del desayuno y tiempo con ellos. Cuando terminaron Victoriano se fue con los gemelos para dejarlos en la escuela y seguir para la procesadora.

Ines se había estado sintiendo mal en los últimos días, no había querido decirle nada a Victoriano para no preocuparlo, pero había decidido ir al doctor. Fue con su ginecóloga de siempre, llevaba tiempo con ella y le daba mucha confianza.

Hola Diana Elisa como estas

Bien Ines pero por lo que veo tu no tanto

Por eso vengo, llevó días sintiéndome mal

A ver cuéntame los síntomas y cuanto llevas con ellos

Ines le contó lo que pasaba con lujo de detalles, Diana Elisa escribió algunas cosas y se quedó pensando unos minutos. Le mandó a hacer unos análisis de sangre para descartar que fuera algo malo, Ines fue al laboratorio y se los hizo, no quería esperar más. Una hora después por fin estuvieron listos los resultados y con apuro se los trajeron a la doctora, Ines estaba sentada frente a ella muy nerviosa, sentía que todo su cuerpo le sudaba frío. Abrió el sobre y lo leyó con calma, una sonrisa se formó en su rostro.

Qué dice ese papel, dime ya por favor

Tranquila no tienes nada de cuidado, lo que tienes se te pasara en unos meses, - le expresó con una sonrisa

Entonces quieres decir que estoy, - no pudo terminar la frase de la emoción

Si Ines, estás embarazada, felicidades

Gracias, la verdad no lo esperaba pero me alegra mucho

Necesito hacerte una ecografia para ver como va todo

Claro que si

Ines se cambió rápido, y la ginecóloga procedió a hacerle la ecografía, allí se dieron cuenta que todo marchaba bien con el bebe. Ines tenia 10 semanas de embarazo por lo que el bebe estaba pequeño, pero lo que más la emocionó fue escuchar el latido de su corazón, unas lágrimas traviesas bajaron por su mejilla al oírlo. Después de varias instrucciones y recomendaciones Ines salió de la clínica directo a la hacienda, ya que casi era hora de que llegaran sus amores.