9: Provocativo

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Era un hermoso día, caluroso, raro para ser otoño, eran finales de octubre y en serio que hacia mucho calor, el calentamiento global en serio era un gran problema.

Ya habían pasado unos dos meses y medio desde que Sanji y Zoro se conocían y tenían la misma rutina de ir al parque y conversar.

Sanji tenía demasiado calor, bañó a su apestoso perro y luego se bañó él, al salir vistió con unos pantalones, cinturón y zapatos de vestir cafés, tuvo suerte por haber tomado ropa que combinara, a veces se veía, como en México coloquialmente se dice: "Se vistió y parecía chile con huevo", esa expresión se refería a que nada combinaba y la mezcla de colores era algo extrema para la vista, pero esta vez Sanji tuvo suerte.

Tomó una camisa, era azul con detalles en azul aún mas claro, se arremangó y dejó algunos de sus botones abiertos mostrando su pecho, se peinó y puso su gafas, se puso lo que el esperaba que fuera protector solar y le puso la correa a su perro, iría al restaurante por su comida y luego iría quizás por un raspado para bajar el calor que sentía todo su cuerpo, quizás era más porque su sentido del tacto estaba potencializado o quizás era exagerado, ambas eran posibles.

Al llegar al restaurante saludó al personal y lo guiaron hasta su mesa, él sentía que la gente lo miraba pero pensó que solo era su imaginación y lo dejó pasar, realmente no era así, en realidad todos lo estaban viendo, se veía muy atractivo, muy provocativo.

-Hola Sanji, veo que te arreglaste, ¿Vas a algún lado? - Preguntó Patty, uno de los cocineros del restaurante.

-Siempre me arreglo imbécil, y no, solo voy al parque, ya sabes, como siempre.

-Te ves demasiado provocador para ir solo al parque galán. - Se burló Patty haciendo que Sanji se sonrojara y tronara la lengua. - Jajaja es chiste, pero en serio te ves bien, muchos aquí te observan ¿Sabes?

-No, no veo. - Dijo serio, ya se había acostumbrado un poco al asunto de no ver pero aún le molestaba.

-Bueno, estoy seguro de que si invitaras a alguien a salir te diría que si, hombre o mujer. - Dijo algo asqueado al ver que la mayoría de las personas que veían a Sanji eran hombres.

-Entonces... ¿Él me dirá que si?- No pudo evitar pensar en invitar a salir a Zoro.

-Jajaja, no se quien sea él pero supongo, aquí esta tu comida. - Y se retiró después de eso dejando a Sanji pensando, una elección de ropa perfecta, un mal comentario, un rubio enamorado y su cerebro calentado por el día, esa si que era la fórmula perfecta para el desastre.

Sanji salió del restaurante lleno de seguridad, invitaría a Zoro a salir, o bueno, solo le diría que si lo acompañaba por un raspado, esa seguridad no era muy fuerte y se empezó a sonrojar al pensar en él y Zoro saliendo, ahí se puso a pensar algo que nunca había pensado: ¿Cómo era Zoro físicamente? Sacudió la cabeza y siguió caminando al parque.

En eso, chocó accidentalmente contra otro hombre.

-Estúpido perro no sirves para nada. - Maldijo a su perro en voz baja. -Eh, discúlpeme, no lo vi.- Rio por lo sarcástico de la situación.

-No se preocu... ¿Sanji? casi ni te reconocí.- Era una voz tranquila y varonil que Sanji de inmediato reconoció, además de ese aroma a madera, no cabía duda era:

-Law... Tiene mucho que no... - Sanji iba a decir "que no te veo" pero recordó que no lo estaba viendo porque no podía ver así que sonrió y se corrigió a si mismo:- Bueno, tenía mucho que no nos encontrábamos.

-Así es, ¿Cómo estás? Bueno... Además de provocativo claro, ¿Qué te dijeron los médicos? ¿Te harán la cirugía o quieres que yo...

-No, no, gracias Law, me dijeron que en unos meses más se podría intentar.

I don't see you... but I love you!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora