LA CASTAÑEDA [TAELICE] [COMPLETA]

TREINTA Y CINCO

Jisoo se removía en  su cama de un lado a otro no podía dormir la angustia no lo dejaba como estaría sufriendo Namjoon por la muerte de su padre

Además de la preocupación que seguramente tenía por no verla p y por qué no sabía dónde estaba ahora cómo le iba avisar que estaba bien y que iba a hacer lo posible por estar con el

-Namjoon, sé que puedes escucharme sé que puedes sentirme... concéntrate por favor concéntrate... encuéntrame ven por mí todo estará bien escúchame -La omega de Jisoo y ella se juntaron en su mente tratando de transmitir el mensaje al Rey Namjoon

Los hermanos Kim pasaron en la noche en vela junto a su madre la reina Jennie dando el último adiós a su padre y rey Kim Seokjin, el pueblo entero estaba en duelo por el asesinato de su Rey.

La reina se mantenía firme sus hijos estaban a su lado, uno de cada lado y ella sostenía las cenizas de su ahora difunto esposo.

-Nam!.... Concéntrate... Encuéntrame.... -Namjoon se sintió mareado de repente, en su cabeza logró escuchar unos leves susurros, se inclinó un poco tomando su cabeza, era demasiado para el...

-Es ella, esta bien... -Su alfa estaba un poco más tranquilo por lo cual pudo escuchar con mejor claridad el mensaje de su omega, pero no quizo alterar más a Namjoon y solo lo tranquilizó con esas palabras

La mañana llegó al reino, un reino que ahora estaba desecho, sin rey y con una traición de por medio, el consejo estaba reunido en espera de los hermanos Kim.

-Buenos días -Dijo Nam en cuanto entró al gran salón, seguido de su pequeño hermano Taehyung

-Sus altezas... -Al unísono y con una reverencia todo el consejo saludó a los hermanos

-Lamentó mucho su pérdida, pero en estos casos de urgencia, el reino necesita tranquilidad y saber que no se ha quedado desprotegido -El más anciano del consejo daba la explicación a los hermanos Kim

-Mi hermano Namjoon, se ara cargo del reino provisionalmente, él es el primogénito y hasta que mi madre de la orden de leer el testamento y última voluntad de mi padre, Namjoon se ara cargo -Taehyung sabia dirigirse al consejo, él amaba las leyes y quería hacer sus propias leyes, jamás pensó en competir con su hermano un día que su padre faltara, tampoco le exigiría a su padre la corona, el solo apoyaría al nuevo Rey, fuera quien fuera.

-Bien, es lo más conveniente... pero... -El anciano estaba por poner un pero pero Namjoon lo detuvo

-Sin peros por ahora... se lo que me dirá y no, no contraeré nupcias con la princesa Wendy Kang, por ahora lo vital es encontrar a los asesinos de mi padre y no poner en riesgo a nadie más...

-Al menos por ahira solo seremos mi hermano y yo solos... a la cabeza del reino, en cuanto se lea la voluntad de mi padre ya veremos -Taehyung y Namjoon lo único que buscaban era tiempo, tiempo para encontrar a sus omegas y tiempo para saber que diría el testamento y cómo iban a convencer al consejo de deshacer los compromisos con la familia Kang

La sesión se cerró y los hermanos Kim, fueron a la habitación de su pálido amigo, Yoongi aún no despertaba.

-¿Como sigue?- un anciano y su esposa ponen paños de agua fría en la frente de una pequeña pelirrubia

-Sigue igual... no está herida sin embargo no despierta y la fiebre no baja -La anciana le explicaba a su esposo los síntomas de la rubiecita

-Yoon~.... Yoon~... -entre sueños pesados y la fiebre Rosé solo lograba balbucear el nombre del pálido

-Buenos días señorita, el príncipe JungKook y el Líder Kim la esperan en el comedor -Una sirvienta se adentró a la habitación de la rubia a dejarle un vestido blanco con azul y le daba indicaciones para que bajara al comedor -La bañera esta lista, puede asarse y aquí está su ropa, si necesita ayuda solo dígame, soy Nayeon

La pelinegra se presentó amablemente, Lisa solo le agradeció y obedeció las órdenes de la pelinegra

-Traigan a Jisoo.... No la lastimen solo... solo díganle que la estamos esperando - El líder Kim mando a su ama de llaves por Jisoo, sabía que estaría enojada pero no quería mantenerla encerrada, no después de todo lo que Sehun le contó que pasaba en la Castañeda

-Comeré aquí, ahora retírate -Apenas bio ingrese al ama de llames a su cuarto, la pelinegra ya se estaba negando a salir, podían haber pasado más de 7 años pero ella conocía muy bien a su padre y hermano, por algo había escapado aquella noche.

Lisa llegó al comedor con los dos hombres, se sintió pequeña al verlos sentados a la mesa, bajo su mirada y se encogió de hombros

-Ooh aquí estás! -JungKook se levantó de su asiento y tomó la mano de Lisa para dirigirla a una silla junto a él -Está bien, no te árenos daño-Soy JungKook, Kim JungKook quizá, no lo recuerdes pero ayer te lo dije ...

-Lisa, Lalisa Manobal .... -Lisa alzó un poquito su mirada para decirle su nombre al castaño

-Es un nombre muy original, él es mi padre el líder Kim, no preguntes más, solo llámalo así -JungKook río un poco y llevo un bocado de fruta a su boca -Puedes estar tranquila, aquí estás a salvo, no es como ese horrible lugar ....no pudo terminar la frase pues Lisa lo interrumpió

-¿Como sabes de la Castañeda? -Le dijo Lisa sorprendida y dejando el vaso de jugo en la mesa

-Ou! ¿Tu estabas ahí? ¿Por eso te encontré en el río? ¿Escapaste? -Dijo JungKook a Lisa con mucha curiosidad

-Algo así... yo... y mis unnies... escapamos... con ayuda de alguien mas... pero... pero nada salió como lo esperábamos... -Lisa jugó con sus deditos, extrañaba a sus Unnies y qué decir de Taehyung, quería a su alfa con ella más que nunca

-Ya veo!... no are mas preguntas por el momento, desayunemos y después saldremos al jardín, daremos un paseo quizá te sientas mejor y podamos charlar con más calma -JungKook si que era un líder nato, sin que Lisa pudiera siquiera pestañear, él ya había planeado casi todo su día
Lisa solo le regalo una tímida sonrisa, no le agradaba del todo aquel castaño, pero de un momento a otro su omega se sintió segura con las palabras de JungKook.

Hola, este capituló ya lo tenía desde el viernes, pero he tenido mil cosas que hacer... espero lo disfruten y díganme les esta agradando la historia?

No olviden dejar su estrellita