Me pierdo en tus ojos (Madelaine Petsch y tú)

C A P Í T U L O 61

_____ Williams.

—¿Qué quieres ver?—formuló la rubia.

Me encogí de hombros.

—No lo sé, cualquier cosa que te guste.

—Vamos, di alguna, no sé nada de ti y tus gustos, solo lo poco que me has contado y lo que hay en Internet—agregó.

—Es que...no lo sé—mentí—Me gusta cualquier cosa.

—Ahg, bien, ¿Algo de acción?

Torci los labios pero asentí, ella hizo clic en Netflix y comenzo a buscar una.

[Flashback]

—¿Qué vamos a ver?—Mads inquirió—¿Algo de Disney?

Asentí como una pequeña niña, la pelirroja hizo clic y empezó a buscar algo.

—Coloca, "La bella y la bestia"—mencioné.

—La hemos visto millones de veces—aclaró mirándome—¿Por qué no vemos...no lo sé...Sherk?

Fruncí el ceño y negue, ella rió.

—¿Por favor?—comente mientras me acurrucaba  en su pecho.

—Bien—vi por el rabillo del ojo como sonrió y colocó la película que había escogido.

[Fin del flashback]

Sonreí ante el recuerdo, después de unos minutos, Dove colocó una película que casi ni le preste atención, solo me quería dormir.

Estas semanas no he descansado mucho, el trabajo me tiene agotada, mamá depende de más atención y también esta la situación con Madelaine.

Mañana sería primero de diciembre y pensar que hace unas semanas platicaba con la pelirroja de que haríamos en estas fechas juntas.

-

Rato después, en la madrugada, me desperté con Dove girada de espaldas.

Sentí como la puerta principal se abrió, agarre de la mesa de noche mi teléfono.

3:04 a.m

Talle mis ojos con las palmas de mis manos, salí de la habitación sin hacer ruido, baje las escaleras y llegue al comedor donde pude ver a Davina recién apareciendo.

Tiene su vestido negro aún, su maquillaje está un poco corrido y su cabello esta un tanto desordenado.

—¿En serio?—cuestione.

Ella rió por lo bajo y se dirigió a mí.

—¿Qué haces despierta?

—Quería escapar de la rubia un rato—mencione.

—¿Quieres hablar?—asentí vacilante,—Vamos a la habitación, no quiero que vaya a escuchar.

La castaña tomo mi mano y me llevó hacia su habitación, ya adentro me tire sobre su cama, ella cerró la puerta con seguro y se dirigió a su closet.

—Bien, ¿Qué pasa?—quiso saber, mientras sacaba un short corto y una camisa con mangas cortas.

—No sé si es porque estamos empezando la relación pero...no me siento del todo cómoda.

Davina quito su vestido quedando en ropa interior de encaje. Ya me había acostumbrado a verla así e incluso desnuda desde los diecisiete.

—Es como si...fuéramos unas piezas que encajan pero somos de diferentes rompecabezas—hablé metafóricamente.

Ella enarco una ceja y colocó su pijama, se sentó a un lado de mí.

—Siento que no puedo abrirme del todo con ella, no como lo hacia con la zanahoria—comente.

—Tenemos conexiones diferentes con las personas, a veces les confiamos todo en poco tiempo o puede que después de mucho—ella se encogió de hombros—Solo dale tiempo, pero recuerda lo que te dije la otra vez. Si sientes que no puedes corresponderle de la misma forma es mejor que no sigas, no solo la lastimaras y le mentiras a ella, sino a ti misma.

—Deberías ser psicóloga—comente, ella dio un leve golpe en mi nariz—Auch.

—Toma las cosas en serio, ____.

—Lo hago en serio, pero también creo estar confundida.

D iba a responder pero sus labios se cerraron al escuchar un ruido, ambas fruncimos el ceño.

Y salimos de la habitación, al llegar a la sala encontramos a Dove.

Ella giro a vernos.

—Salí a buscarte, me desperté y no te vi en la habitación—mencionó.

—Vine por agua y me encontré a Davina—respondí.

—Tengo sueño, ¿Hablamos mañana?—la castaña se metió en la conversación.

Le di una asentimiento de cabeza, Davina le dio una sonrisa a la rubia y luego se fue devuelta a su habitación.

—¿Vamos?—inquirió.

—Vamos—sonreí levemente.

Subimos nuevamente a mi habitación y nos metimos en las sabanas, Dove me abrazo por la cintura pegándose más a mi cuerpo.

Cerre los ojos tratando de dormirme los más rápido posible.

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