La Isla [He Tian x Jian Yi]

Vida diaria - 7

Tres días más y la tensión nuevamente se sentía en el aire.

Como todos los recientes días estaban en la ladera, sentados en la punta de esta, mirando al agua que personalmente los estaba cansando.

"Si tengo que ver una ola estrellarse una vez más..." ese pensamiento les había aparecido a ambos en algún momento, aun así ambos habían visto una ola de nuevo, y otra, y otra, porque seguían ahí.

―He Tian, estoy aburrido.

Como ya es normal, es el rubio quien inicia la conversación. Su compañero solo hace un ruido de entendimiento y sigue mirando al horizonte, sin prestarle más atención.

―He Tian, me pica la piel ―dijo esta vez mirando su piel rojiza, al igual que He Tian con la prolongada exposición al sol habían estado adquiriendo quemaduras propias del verano― ¿Crees que me quede lindo un bronceado?

―No.

Jian Yi le sacó la lengua en reacción― A ti tampoco.

Luego volvieron a su silencio típico. Cuando Jian Yi fijó su atención en el pelinegro a su lado (para molestarlo probablemente) nota como He Tian estaba recostado con sus ojos cerrado.

Oh.

Tiene sentido, han pasado una semana realmente terrible, particularmente la noche anterior había sido mala para He Tian.

Ayer se habían dormido tarde porque el clima había estado ventoso, causando ruidos que los habían tenido a ambos paranoicos, obligándolos a permanecer tan despiertos como su cuerpo cansado pudo. Cuando finalmente se durmieron no habrá pasado ni una hora cuando He Tian tuvo una pesadilla lo suficientemente mala que lo hizo salir en medio de la noche.

¿Cuánto habrá dormido realmente? Quizás una o dos horas a lo mucho, sumado a todos los días que también había dormido bastante mal...

Entonces mejor dejarlo descansar. De todas formas no es como que tuvieran que hacer mucho, solo observar debería estar bien para Jian Yi.

Con solo el sonido de la naturaleza y la ligera respiración de He Tian, se quedó esperando.

Aburrido y esperando...

Aburrido, incómodo y esperando...

Aburrido, incómodo, tiene miedo, está enojado y cansado... Ah, y esperando.

Todo mal en su existencia la verdad.

Ante nada que hacer más que ver el mar lo único que le queda es pensar, reflexionar, lo que realmente no quiere en este momento.

Pero es lo que le toca.

Entonces piensa, piensa en que la comida no es mala, pero realmente quisiera un plato de fideos en este momento. Si tan solo pudiera tener un refrigerador lleno de su comida favorita, incluso la no tan favorita, sería realmente grandioso.

Y un refresco, ¡lo que daría por algo que tomar con sabor! O un snack, frituras que obviamente le harían mal, aunque no tan mal como el sol abrasador en este momento.

Ah, el sol. Quemando su piel en toda su extensión no cubierta de ropa, es odioso, le hace picar y doler la piel, además de hacerlo ver como un camarón rubio.

Ah... Sí, no es tan agradable, aunque no es lo peor.

"Obviamente no es lo peor, toda esta situación es la peor" piensa, y de inmediato intenta cambiar su ritmo de pensamiento. No es momento de llorar sobre la leche derramada, es momento de tener calma y paciencia.