PRÓLOGO

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Prologo.

Insomnio.

Si, todo comenzó con algo que digamos el ¿80%? De los jóvenes tenemos hoy en día, bueno quizás no tan joven la verdad, tengo una edad que no sabrán aún.

En fin, enfoquemonos en lo que pasa.

Llevo años con Insomnio, el hecho de no poder dormir en las noches a veces no es bueno ya que la mayoría de veces no puedo estar despierto a las dos de la mañana mirando las aburridas noticias o platicando con mis gatos como si me escuchasen. Tengo un trabajo estable y cabe a recalcar que tengo un hijo de 16 años a quién medio mantener pero ahí está el jodido problema.

El trabajo.

Empiezo a las siete de la mañana, me encanta y no tengo nada que decir en contra de el pero lo que falla es mi Insomnio que no me deja pegar las pestañas a las once.

Limpie, aspiré, le cociné a mis gatos y ya no se que hacer en este jodido departamento. Suspiré con frustración mirando la hora nuevamente en el reloj de pared, apenas eran las dos y cuarenta de la madrugada.

Me tiré en mi sofa con rabia, cambiaba los canales como si no hubiese un mañana pensando en la excusa perfecta para faltar al trabajo. Sin embargo un canto no muy bueno a fuera de las rejas para entrar al conjunto de departamentos me asustó, me levante del sofá con calma (como lo haría un adulto normal para investigar o chismosear la situación)

No habia nada, nada de nada, era como si mi prescencia en la ventana hubiese espantado al vagabundo o animal callejero. Me alivie un poco la verdad al punto de calmar el susto al oir esa horrenda voz, que estupidez.

Mire las ventanas vecinas bajando hasta el contenedor de basura que daba directo a las calles oscuras, las pocas luces del sendero alumbraban una miseria y eso que era la ciudad principal. Iba a despegarme de mi ventanal cuando me fije bien en los contenedores.

Alguien.

Alguien mirándome a mí.

Parpadee, me limpie los ojos dramáticamente por pensar en estúpidos efectos de la insomnia y joder, si hay una persona ahi.

Y repito. ¡Me está mirando!

Era tan solo un niño, pero al notar por su mal equilibrio quizá haya salido a beber o se perdió y lo drogaron. Mi lado bueno queria acogerlo y darle de comer para después tirarlo nuevamente a la calle y que Dios se apiade de el, y mi lado maldito me decia que no me preocupara y diera vuelta cerrando las cortinas.

A quien coño engaño

Tome mi sueter y las llaves, de casualidad Haneul me regalo una navaja de bolsillo por el día de los padres así que llevarla no esta de mas por proteccion. Estaba muy nervioso y dudando bastante al ver los numeros del ascensor en cuenta regresiva hasta quedar en el lobby del apartamento. No le voy a mentir, estoy cagadisimo, no sólo por el vagabundo de niño que esta a pocos metros de mí, sino que el lobby no tiene la suficiente iluminación como para no dar miedo, parece una escena de AHS.

Tomé una gran bocanada de aire y avancé hasta pasar la dicha tarjeta, poner el codigo y verle ahi.

El mocoso vomitando.

No tenía ni idea de como iba a acercame, dedubite mucho en como ayudarle, me veia patetico seguramente intentando picarle el hombro.

-¿Estas bien?- Joder, pero que pregunta tan idiota.

El mocoso nego, claro que iba a negar, vi su desayuno, almuerzo y cena en el vomito.

-Estoy bien.- musitó suave, pasaba sus mangas una y otra vez por su boca.

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⏰ Última actualización: Oct 07, 2022 ⏰

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