She | Jenlisa

𝟱𝟴

—Pero tengo frío igual...— Jennie seguía ebria, tanto así que empezó a hacer arcadas.

—Joder no me vomites encima, este pantalón me lo compré con mi primer sueldo.

A lo lejos observó cómo una figura femenina se acercaba.

—Vomitale a Lisa, no a mí.— pidió Tae alejándose.

—Callate idiota...— río y volvió a hacer arcadas.

Manoban ya se había acercado lo suficiente.

Taeyang temió por su vida, se puso bien la chaqueta y bajó la mirada para ser irreconocible.

—¡Lisa!...— Exclamó Kim sonriendo.

—Gracias, me la llevo.— avisó Lisa y se agachó para que la surcoreana se subiera a su espalda. Esta lo hizo mientras abrazaba su cuello.

—Genial, buenas tardes, adiós.— Son fingió una voz, y salió corriendo del lugar.

Lisa comenzó a caminar de vuelta mientras afirmaba bien a la contraria.

—Lisa te extrañé...

Esta no respondió.

—Oye... ¿Porqué nunca me dejas explicarte nada?...— le reclamó la menor.

—¿Tienes algo que explicar?— preguntó con seriedad.

—Joder, yo no conozco a ese idi-

Hizo una arcada y sin aviso vomitó. Lisa rápidamente la bajó y la llevó a una esquina.

La agachó y le sobó la espalda, mientras pensaba en lo que le había dicho.

—¿Porqué mierda vas a emborracharte con idiotas que no conoces?

—Esto no habría pasado si en las escaleras no me hubieras igno-

Vomitó nuevamente...

(...)

Lisa caminaba con Kim dormida en su espalda como un koala.

Llegó a su departamento y abrió la puerta, entró y luego cerró.

Se dirigió a su pequeña habitación y recostó ahí a la contraria.

Abrió el armario y sacó una polera negra.

Se acercó de nuevo a Jennie, retiró su camisa y le colocó la que había sacado recientemente. Por último sacó su pantalón y zapatos, abrió las sábanas y la recostó.

—Tú y el alcohol eh...