She | Jenlisa

𝟲𝟭

Tenía sentimientos encontrados con el menor después de seguirle el juego a Haneul. Pero después de todo, que más daba, estaba llorando desconsoladamente en su puerta sin parar.

—Dios, ¿Tae estás bien? ¿Qué sucedió?— Lisa se agachó a la altura del chico.

Ella sabe que la culpa realmente no era de él. Su hermana era capaz de todo, incluso amenazarlo si no lo hacía. Confiaba en el, sabía que era un buen hombre. Aparte de haberle lanzado la caja del juego a la cabeza, confiaba plenamente en él.

Durante el periodo de amistad con Haneul, el era como otro hermano pequeño para ella. Le recordaba tanto a Cheol que lo único que quería era protegerlo del mundo exterior.

Taeyang se levantó con brusquedad, y a la vez levantó a la mayor del cuello de la camisa. Y la adentró en el departamento.

—HANEUL MURIÓ POR TU MALDITA CULPA, ¿NO MIDES LO QUE DICES? ¿VES LO QUE HICISTE?

Lisa se quedó completamente paralizada.

Sus lágrimas inundaron sus ojos.

Pero jamás iba a entender el dolor que sentía el chico.

—ELLA SE SUICIDÓ MALDITA SEA, Y TODO ES TU CULPA.

Son comenzó a pegarle con débiles manotazos a la contraria en el pecho y hombros.

Se tiró al piso completamente devastado apoyando su cabeza en el sofá, lloraba como nunca había visto llorar a una persona.

Jennie claramente se despertó por los gritos, así que se levantó de golpe, mareándose un poco.

—¿Qué está pasando?, ¿Taeyang?

En cambio, la castaña no conocía de toda la vida al chico. Y le caía mal.

Pero ninguno respondió, la surcoreana ya suponía lo que pasó.

Nunca pensó ver a Taeyang tan triste, siempre lo imaginó como un idiota que intentaba enamorar a todas, y que juega roblox.

La de pecas no pronunciaba ni la más mínima palabra, estaba perpleja con lágrimas en sus ojos.

¿Había provocado el suicidio de su ex-mejor amiga?

Solo se limitó a sentarse al lado del menor y lo abrazó.

Este hizo lo mismo y escondió su cabeza en su cuello mientras lloraba amargamente.