Todo de Mi

Reencuentro

- Interesante. Desde que te conozco esta es la primera vez que te veo ruborizada. Supongo que este pelirrojo es parte de tu interesante guardia.- Le comentó Rey mientras tomaba su propio pedido.- Ya veo que no solo me tienes que actualizar sobre las rondas.

- Rondas,  cierto. Busquemos un lugar donde sentarnos y te pongo al día.

Ambas doctoras caminaron hacia una de las mesas que se encontraba libre. Una vez que se sentaron Rose se dedico a beber de su café, con las mejillas un poco más sonrojadas de lo que había estado anteriormente y a Rey le parecía adorable verla en ese estado.

Para ella Rose se había convertido en una gran amiga, se habían convertido en estos últimos meses trabajando juntas en un equipo y el cariño entre ellas era sincero. Rey conocía sobre todo lo que había vivido Rose. A palabras de la pelinegra: Toda su vida buscó superarse. En vez de disfrutar y tener sus primeros amores de la secundaria, ir a fiestas y disfrutar con amigos, ella se pasó la mayoría de la secundaria rodeada de libros, visitando bibliotecas y estudiando para lograr sus metas. Nunca había tenido una relación verdadera. Había salido con chicos cuando comenzó la universidad, pero fue solo para llenar sus necesidades y cuando una pareja empezaba a exigir mas de ella lo dejaba.

Había escapado durante toda su vida del amor. Sus metas personales estaban primero, pero ella sabía que dentro de esos muros que su amiga se auto imponía, había una mujer que soñaba con tener un romance digno de un libro.

- Entonces ¿Me dirás la historia de ese café y del famoso pelirrojo que dice Rachel?

- Nada memorable Rey. Simplemente me choqué con el acompañante de tu paciente. De Solo. Mi café terminó todo regado en su camisa y en ese momento tuve que ir a una emergencia.- Comentó Rose mientras Rey la escuchaba atentamente.- Luego en mis rondas me lo volví a cruzar cuando fui a chequear a Solo y le reclamé que me debía un café.- Levantó el vaso con la bebida caliente y girando el mensaje hacia la vista de Rey para que lo pudiera leer.- Y por lo que veo jugué bien mis cartas y voy a tener pronto una cita con un sexy pelirrojo.

- Oh, entonces debo de asumir que ese choque no fue un accidente.- Afirmó la castaña y su amiga solo asintió con una sonrisa en sus labios.- Lo conocí anoche, luego de la cirugía de Solo.- Se sintió extraña al nombrar a Ben de esa forma.- Por lo poco que hablamos me dio una buena impresión y admito que es un tipo apuesto, no es mi tipo, pero tiene lo suyo. Pero, ¿Entonces nos olvidamos de Finn?

- Creo que había quedado claro que nos olvidábamos cuando te conté lo que fue la cita.- Ambas se rieron.

Continuaron con su merienda y entre dos cafés que bebieron se pusieron a hablar de los pacientes que tenían en común y le tocaba a Rey visitar en sus rondas. Estaban por nombrar al último de la lista de Rose cuando una joven residente las interrumpió.

- Doctora Dameron, doctora Tico, disculpen que las interrumpa pero necesito hacerle una pregunta a la doctora Dameron.- Ambas miraron a la chica que se encontraba de pie en frente a la mesa donde se encontraban comiendo. Rey observó a la joven residente, era Josephine Warren, una de las mejores estudiantes que habían ingresado en su generación y gran candidata a especializarse en su área.

- No hay problema Jo. ¿Cuál es tu consulta?

La chica se puso un poco nerviosa ante la atenta mirada que le daba Rose. Miró hacia el suelo unos segundos, Rey pudo notar que sus mejillas adquirían un tono rosado y que sus manos jugaban con el borde del cartel identificador. - Me preguntaba Dra. Dameron si ya había decidido que residente la acompañará hoy en sus rondas.

La carcajada de Rose hizo que ambas mujeres la observaran, incluso se podría decir que varias de las personas que se encontraban en las mesas cercanas se giraron a verlas gracias a la fuerza con la que se rió. Rey la miró con una interrogante dibujada en su rostro y Josephine solo se encogió intentando en vano pasar desapercibida.