Celo [Sciles] Teen Wolf One-shot.

1

Stiles estaba agotado, llevaba días sin dormir por estar investigando al villano de turno que atormentaba a Beacon hills. Casi todos se habían ido, dejando todo el trabajo al pobre humano.

Todos, salvo por Scott. Stiles le había insistido para que se fuera con Kira, pero el lobo se rehusó y terminó cediendo. La verdad estaba feliz, hace meses que no eran solo ellos dos y lo extrañaba.

Stiles estaba sentado en su escritorio moviendo la vista frenéticamente de un papel a otro, estaba tan concentrado que se sobresaltó cuando los brazos de Scott rodearon su cuello.

—Scott… ¿qué haces? —preguntó sin quitarlo y sus ojos aún fijos en las hojas que reposaban en sus manos.

—¿Acaso no puedo abrazar a mi mejor amigo? —murmuró y con su nariz acaricio la mejilla del humano.

—Ah… sí puedes, solo que hace mucho no lo hacías —se encogió de hombros y siguió con su trabajo.

Trató de ignorar los pequeños gruñidos que soltaba Scott, asumiendo que era algo de lobos, pero no pudo ignorar cuando los colmillos de su amigo se encajaron en su cuello y rompieron levemente su piel. Se puso de pie y haciendo uso de toda su fuerza empujó a Scott, quien por la sorpresa cayó al suelo.

—¿Qué mierda, Scott? —gritó Stiles, presionando con una mano la herida en su cuello.

—Stiles… no sé qué me pasa. Ah… calor —jadeo y sus ojos brillaron rojos.

—¿Te envenenaron?  —se acercó al lobo sin pensarlo, se veía mal, como cuando había estado en contacto con acónito.

Apenas se hubo acuclillado a su lado fue empujado, choco dolorosamente con el suelo y el cuerpo de Scott sobre él lo inmovilizo completamente.

—Lo siento, Stiles —no pudo reaccionar cuando los labios de Scott chocaron con los de él.

Scott lo besó de forma violenta y desesperada, quejidos de parte de Stiles era lo único que se escuchaba en la habitación. Trató de empujarlo cuando sintió sus manos adentrándose en su camiseta y luego las garras enterrándose en su cintura. Quiso gritar, pero Scott aprovechó para meter su lengua y besarlo más apasionadamente. No sabía qué estaba pasando, pero terminó dejándose llevar. No era como se lo había imaginado, pero tenía que decir que si quitaba el dolor de la mordida y rasguños lo estaba disfrutando. Por fin podía comprobar de primera mano lo buen besador que era su Scotty.

Después de unos minutos eternos consiguió apartar al lobo, sus ojos seguían rojos, sus pupilas dilatadas y respiraba agitadamente, al igual que el humano.

—¿Y esto por qué? —Scott lo miraba intensamente, sin apartar las manos de su torso, pero ahora lo acariciaba gentilmente en vez de clavar sus garras.

—No lo sé, solo quiero besarte y tocar tu cuerpo —su voz se escuchó rasposa y gruñidos involuntarios seguían saliendo de su garganta.

—¿Es una propuesta para reforzar la amistad? Nunca lo espere de ti, lobito —se rio burlonamente, pero se arrepintió al sentir las garras haciendo presión—. Uy, alguien no está de humor para bromas al parecer.

—Sigue y te morderé —le gruñó mostrando sus colmillos para recalcar lo dicho.

—Uh, creo que has pasado mucho tiempo con Derek, Scotty —iba a reírse, pero Scott acercó su boca abierta peligrosamente a su cuello—. ¡Está bien! ¡Lo siento!

—Stiles, quiero besarte. ¿Puedo besarte? —la mirada de Scott lo dejó sin aliento, así que asintió con la cabeza.

Scott empezó otro beso, menos apasionado que el anterior, pero aún así intenso. Sus manos comenzaron a moverse lentamente hacia arriba hasta rozar sus pezones con sus garras, haciendo gemir a Stiles. Se alejó y quitó sus manos, Stiles lo miró confundido. Sonriendo tomo el cuello de la camisa de Stiles y haciendo uso de su fuerza rompió en dos la prenda. Sin pensarlo bajó y mordisqueo el pezón derecho, Stiles jadeo por el dolor al ser mordido en un área tan sensible, pero no se apartó. Quería ver que tan lejos podían llegar.